Amós, 4:9 Versículo Bíblico

El versiculo Amós, 4:9 de los Textos Sagrados que componen la Biblia consiste en algo que nos conviene tener siempre presente de manera que podamos analizarlo y pensar acerca de él.Probablemente sería acertado cuestionarse ¿Qué pretendía proponernos Dios con el versículo Amós, 4:9? ¿En qué ocasiones de nuestra vida diaria podemos poner en práctica aquello que hemos aprendido gracias al versículo Amós, 4:9 de la Santa Biblia?

Dedicar tiempo a la meditación en relación con el versículo Amós, 4:9 nos ayuda a ser mejores cristianos y a elevar nuestra alma hacia Dios, por esa cuestión es bueno recurrir al versículo Amós, 4:9 todas y cada una de las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir de modo que podamos saber cómo actuar o para traer la serenidad a nuestros corazones.

Os herí con viento solano y oruga; vuestros muchos huertos y vuestras viñas, y vuestros higuerales y vuestros olivares comió la langosta: pero nunca os tornasteis a mí, dice Jehová.

Opiniones de nuestros usuarios

Jaume Galindo Mateos

Gracias, gracias,gracias Padre. Tu amor infinito se nos muestra en este versículo Amós, 4:9 y en todas y cada una de las palabras que escribiste en la Biblia para nosotros. Gracias a ellas la salvación de nuestras almas está cerca.

Rafael Montoya Lozano

Este versículo Amós, 4:9 se lo voy a mandar a mi mamá, pues ella siempre anda diciendo cosas de Diosito y pues en esto se contradice y no es verdad lo que ella dice, y creo yo que la Biblia sabe mas de Diosito que mi mama pues los que la escribieron conocieron a Diosito y mi mama pues si está mayor pero no tanto.

German Pons Robles

El versiculo Amós, 4:9 me hiso reflecsionar. Dios nos ama y debemos amarle. Amen.

Gonzalo Tomas Ibañez

El versículo Amós, 4:9 es la palabra de Dios. Amén.

Silvia Vallejo Polo

Se agradece una web como esta, sin interferencias, en la que encuentras fácilmente el versículo Amós, 4:9 y puedes meditar tranquilamente sobre él. No quiero que me lo anden explicando, tan solo Dios puede hacerlo.