Apocalipsis Capítulo 22

Dios, Nuestro Señor se nos manifiesta a nosotros, sus hijos e hijas, y esto lo hace mediante las Sagradas Escrituras que componen la Biblia. En la Sagrada Biblia está escrita su palabra y sus lecciones para la humanidad. En nuestra mano está leerla y tratar de captar toda la sabiduría que se halla en sus palabras. En el capítulo 22 del Apocalipsis del Nuevo Testamento de la Biblia se encuentran escondidas auténticas dosis de conocimiento y bondad que Dios Creador regaló a los hombres con el objetivo de que ellos llegaran a aproximarse a Él.

El Apocalipsis del Nuevo Testamento está formado por 22 capítulos. Ahora en nuestra web puedes leer e interiorizar aquello que Dios quiso enseñarnos en el capítulo 22. Para facilitar su lectura y comprensión el capítulo 22 del Apocalipsis está dividido en 21 versículos. Así es más fácil leer y retener en la memoria la palabra Dios Todopoderoso, de forma que te acompañe siempre y te sirva para trazar tu rumbo.

Nuestro Padre, Dios Todopoderoso es quien jamás nos abandonará a pesar de las circunstancias, es un padre clemente que nos aconseja. Ese fue el motivo por el cual nos dió su palabra que nos orienta y sirve de faro en los periodos más oscuros. En el capítulo 22 del Apocalipsis del Nuevo Testamento descubrirás sin dudarlo la solución a muchas de las preguntas que te puedan surgir durante la vida. Al principio de tu diálogo con el Padre, haber leído su palabra escrita en las Sagradas Escrituras, y entender profundamente los 21 versículos del capítulo 22 del Apocalipsis te será muy útil. De esta manera podrás tener siempre presente en tus plegarias en qué consiste la verdadera palabra de Nuestro Señor.

Versículos del capítulo 22 del libro Apocalipsis

Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero..

En el medio de la plaza de ella, y de la una y de la otra parte del río, estaba el árbol de la vida, que lleva doce frutos, dando cada mes su fruto: y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones..

Y no habrá más maldición; sino que el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán..

Y verán su cara; y su nombre estará en sus frentes..

Y allí no habrá más noche; y no tienen necesidad de lumbre de antorcha, ni de lumbre de sol: porque el Señor Dios los alumbrará: y reinarán para siempre jamás..

Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor Dios de los santos profetas ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que es necesario que sean hechas presto..

Y he aquí, vengo presto. Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro..

Yo Juan soy el que ha oído y visto estas cosas. Y después que hube oído y visto, me postré para adorar delante de los pies del ángel que me mostraba estas cosas..

Y Él me dijo: Mira que no lo hagas: porque yo soy siervo contigo, y con tus hermanos los profetas, y con los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios..

Y me dijo: No selles las palabras de la profecía de este libro; porque el tiempo está cerca..

El que es injusto, sea injusto todavía: y el que es sucio, ensúciese todavía: y el que es justo, sea todavía justificado: y el santo sea santificado todavía..

Y he aquí, yo vengo presto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según fuere su obra..

Yo soy Alpha y Omega, principio y fin, el primero y el postrero..

Bienaventurados los que guardan sus mandamientos, para que su potencia sea en el árbol de la vida, y que entren por las puertas en la ciudad..

Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, y los disolutos, y los homicidas, y los idólatras, y cualquiera que ama y hace mentira..

Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente, y de la mañana..

Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga: y el que quiere, tome del agua de la vida de balde..

Porque yo protesto a cualquiera que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios pondrá sobre Él las plagas que están escritas en este libro..

Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad, y de las cosas que están escritas en este libro..

El que da testimonio de estas cosas, dice: Ciertamente, vengo en breve. Amén, sea así. Ven: Señor Jesús..

La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén..