Colosenses Capítulo 3

Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo se nos manifiesta a nosotros, sus hijos e hijas, y nos habla por medio de la Sagrada Biblia. En la Biblia es donde se encuentra escrita su palabra y sus enseñanzas para la humanidad. Nosotros disponemos del libre albedrío para leerla y comprender toda la sabiduría que se halla en sus palabras. En el capítulo 3 del Colosenses del Nuevo Testamento de la Biblia se hallan confinadas píldoras de conocimiento que Dios Padre otorgó a los seres humanos para que así ellos tuvieran la capacidad de aproximarse a Él.

El Colosenses del Nuevo Testamento dispone de 4 capítulos. En esta web te ofrecemos la posibilidad de leer y aprehender lo que Dios deseó enseñarnos en el capítulo 3. Para facilitar su lectura y comprensión el capítulo 3 del Colosenses se halla dividido en 25 versículos. De este modo es más simple leer y memorizar la palabra del Señor, para que así esté a tu lado siempre y te sirva de orientación y guía.

Dios Nuestro Señor jamás nos deja solos, es un padre compasivo que nos guía. Ese fue el motivo por el cual nos obsequió con su palabra que nos orienta y sirve de fanal en los trances más oscuros. En el capítulo 3 del Colosenses del Nuevo Testamento podrás encontrar con toda seguridad la respuesta a muchas de las preguntas que de pronto aparecen durante la vida. En el inicio de tu diálogo con el Padre, haber leído su palabra escrita en los textos que componen la Biblia, y dominar profundamente los 25 versículos del capítulo 3 del Colosenses te será extremadamente útil. De esta forma tendrás siempre presente en tus oraciones en qué consiste la verdadera palabra de Nuestro Señor.

Versículos del capítulo 3 del libro Colosenses

Si habéis pues resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios..

Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra..

Porque muertos sois, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios..

Cuando Cristo, vuestra vida, se manifestare, entonces vosotros también seréis manifestados con Él en gloria..

Amortiguad, pues, vuestros miembros que están sobre la tierra: fornicación, inmundicia, molicie, mala concupiscencia, y avaricia, que es idolatría:.

Por las cuales cosas la ira de Dios viene sobre los hijos de rebelión..

En las cuales vosotros también anduvisteis en otro tiempo viviendo en ellas..

Mas ahora, dejad también vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, maledicencia, torpes palabras de vuestra boca..

No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo hombre con sus hechos,.

Y revestídoos del nuevo, el cual por el conocimiento es renovado conforme a la imagen del que lo crió;.

Donde no hay Griego ni Judío, circuncisión ni incircuncisión, bárbaro ni Scytha, siervo ni libre; mas Cristo es el todo, y en todos..

Vestíos pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañas de misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de tolerancia;.

Sufriéndoos los unos a los otros, y perdonándoos los unos a los otros si alguno tuviere queja del otro: de la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros..

Y sobre todas estas cosas vestíos de caridad, la cual es el vínculo de la perfección..

Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la cual asimismo sois llamados en un cuerpo; y sed agradecidos..

La palabra de Cristo habite en vosotros en abundancia en toda sabiduría, enseñándoos y exhortándoos los unos a los otros con salmos e himnos y canciones espirituales, con gracia cantando en vuestros corazones al Señor..

Y todo lo que hacéis, sea de palabra, o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por Él..

Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor..

Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seáis desapacibles con ellas..

Hijos, obedeced a vuestros padres en todo; porque esto agrada al Señor..

Padres, no irritéis a vuestros hijos, porque no se hagan de poco ánimo..

Siervos, obedeced en todo a vuestros amos carnales, no sirviendo al ojo, como los que agradan a los hombres, sino con sencillez de corazón, temiendo a Dios:.

Y todo lo que hagáis, hacedlo de ánimo, como al Señor, y no a los hombres;.

Sabiendo que del Señor recibiréis la compensación de la herencia: porque al Señor Cristo servís..

Mas el que hace injuria, recibirá la injuria que hiciere; que no hay acepción de personas..