Daniel Capítulo 1

Dios nos habla a nosotros, sus hijos e hijas, y lo hace a través de la Sagrada Biblia. En ella está escrita su palabra y sus enseñanzas para la humanidad. De nosotros depende leerla y entender toda la bondad y sabiduría que reside en sus palabras. En el capítulo 1 del Daniel del Nuevo Testamento de las Sagradas Escrituras se hallan resguardadas porciones de bondad y sabiduría que el Padre entregó a los seres humanos para que ellos llegaran a aproximarse a Él.

El Daniel del Nuevo Testamento consta de 12 capítulos. Ahora puedes leer e interiorizar lo que Nuestro Señor deseó enseñarnos en el capítulo 1. Para que sea más fácil leerlo y comprenderlo el capítulo 1 del Daniel se halla fraccionado en 21 versículos. De esta manera es más fácil leer y aprender de memoria la palabra del Señor, de modo que esté a tu lado siempre y te sirva para trazar tu rumbo.

Nuestro Padre Bondadoso jamás nos deja solos, es un padre justo que nos orienta. Por eso nos brindó su palabra que nos orienta y sirve de antorcha en los periodos más oscuros. En el capítulo 1 del Daniel del Nuevo Testamento descubrirás sin dudarlo la clave a muchos de los interrogantes que a menudo se manifiestan en la vida. Al principio de tu diálogo con Nuestro Señor, haber leído su palabra escrita en la Sagrada Biblia, y conocer en profundidad los 21 versículos del capítulo 1 del Daniel te será de mucha ayuda. De este modo te será posible tener siempre presente en tus oraciones cuál es la verdadera palabra de Dios Padre que está en los Cielos.

Versículos del capítulo 1 del libro Daniel

En el año tercero del reinado de Joacim rey de Judá, vino Nabucodonosor rey de Babilonia a Jerusalem, y cercola..

Y el Señor entregó en sus manos a Joacim rey de Judá, y parte de los vasos de la casa de Dios, y trájolos a tierra de Sinar, a la casa de su dios: y metió los vasos en la casa del tesoro de su dios..

Y dijo el rey a Aspenaz, príncipe de sus eunucos, que trajese de los hijos de Israel, del linaje real de los príncipes,.

Muchachos en quienes no hubiese tacha alguna, y de buen parecer, y enseñados en toda sabiduría, y sabios en ciencia, y de buen entendimiento, e idóneos para estar en el palacio del rey; y que les enseñase las letras y la lengua de los Caldeos..

Y señaloles el rey ración para cada día de la ración de la comida del rey, y del vino de su beber: que los criase tres años, para que al fin de ellos estuviesen delante del rey..

Y fueron entre ellos, de los hijos de Judá, Daniel, Ananías, Misael y Azarías:.

A los cuales el príncipe de los eunucos puso nombres: y puso a Daniel, Beltsasar; y a Ananías, Sadrach; y a Misael, Mesach; y a Azarías, Abed-nego..

Y Daniel propuso en su corazón de no contaminarse en la ración de la comida del rey, ni en el vino de su beber: pidió por tanto al príncipe de los eunucos de no contaminarse..

(Y puso Dios a Daniel en gracia y en buena voluntad con el príncipe de los eunucos.).

Y dijo el príncipe de los eunucos a Daniel: Tengo temor de mi señor el rey, que señaló vuestra comida y vuestra bebida; pues luego que él habrá visto vuestros rostros más tristes que los de los muchachos que son semejantes a vosotros, condenaréis para con el rey mi cabeza..

Entonces dijo Daniel a Melsar, que estaba puesto por el príncipe de los eunucos sobre Daniel, Ananías, Misael, y Azarías:.

Prueba, te ruego, tus siervos diez días, y dennos legumbres a comer, y agua a beber..

Parezcan luego delante de ti nuestros rostros, y los rostros de los muchachos que comen de la ración de la comida del rey; y según que vieres, harás con tus siervos..

Consintió pues con ellos en esto, y probó con ellos diez días..

Y al cabo de los diez días pareció el rostro de ellos mejor y más nutrido de carne, que los otros muchachos que comían de la ración de comida del rey..

Así fue que Melsar tomaba la ración de la comida de ellos, y el vino de su beber, y dábales legumbres..

Y a estos cuatro muchachos dioles Dios conocimiento e inteligencia en todas letras y ciencia: mas Daniel tuvo entendimiento en toda visión y sueños..

Pasados pues los días al fin de los cuales había dicho el rey que los trajesen, el príncipe de los eunucos los trajo delante de Nabucodonosor..

Y el rey habló con ellos, y no fue hallado entre todos ellos otro como Daniel, Ananías, Misael, y Azarías: y así estuvieron delante del rey..

Y en todo negocio de sabiduría e inteligencia que el rey les demandó, hallolos diez veces mejores que todos los magos y astrólogos que había en todo su reino..

Y fue Daniel hasta el año primero del rey Ciro..