Deuteronomio Capítulo 26

Dios se nos manifiesta a nosotros, que somos fruto de su Creación, y lo hace a través de los textos sagrados recogidos en La Biblia. En la Sagrada Biblia es el lugar en donde se escribió su palabra y sus enseñanzas para la humanidad. Nosotros somos quienes decidimos si leerla y entender toda la sabiduría que se halla en sus palabras. En el capítulo 26 del Deuteronomio del Nuevo Testamento de las Sagradas Escrituras se encuentran escondidas porciones de bondad y sabiduría que Dios otorgó a sus hijos e hijas para que ellos llegaran a acercarse a Él.

El Deuteronomio del Nuevo Testamento consta de 34 capítulos. Ahora en nuestra web es posible leer y estudiar aquello que Dios Nuestro Señor se propuso mostrarnos en el capítulo 26. Para que la lectura y la comprensión sean más fáciles el capítulo 26 del Deuteronomio está dividido en 19 versículos. De este modo es más fácil leer y retener en la memoria la palabra de Dios, de modo que esté a tu lado siempre y te sirva para guiarte.

Nuestro Padre que todo lo puede jamás nos deja solos, es un padre bueno que nos orienta. Por eso nos dió su palabra que nos ilumina y sirve de antorcha en los trances más oscuros. En el capítulo 26 del Deuteronomio del Nuevo Testamento descubrirás con toda seguridad la solución a muchas de las cuestiones que puedan aparecer durante la vida. En el momento de comenzar tu diálogo con el Altísimo, leer su palabra escrita en las Sagradas Escrituras, y dominar profundamente los 19 versículos del capítulo 26 del Deuteronomio te será muy útil. De esta forma tendrás siempre presente en tus oraciones en qué consiste la verdadera palabra de Dios Todopoderoso.

Versículos del capítulo 26 del libro Deuteronomio

Y será que, cuando hubieres entrado en la tierra que Jehová tu Dios te da por heredad, y la poseyeres, y habitares en ella;.

Entonces tomarás de las primicias de todos los frutos de la tierra, que sacares de tu tierra que Jehová tu Dios te da, y lo pondrás en un canastillo, e irás al lugar que Jehová tu Dios escogiere para hacer habitar allí su nombre..

Y llegarás al sacerdote que fuere en aquellos días, y le dirás: Reconozco hoy a Jehová tu Dios que he entrado en la tierra que juró Jehová a nuestros padres que nos había de dar..

Y el sacerdote tomará el canastillo de tu mano, y pondralo delante del altar de Jehová tu Dios..

Entonces hablarás y dirás delante de Jehová tu Dios: Un Siro a punto de perecer fue mi padre, el cual descendió a Egipto y peregrinó allá con pocos hombres, y allí creció en gente grande, fuerte y numerosa:.

Y los Egipcios nos maltrataron, y nos afligieron, y pusieron sobre nosotros dura servidumbre..

Y clamamos a Jehová Dios de nuestros padres; y oyó Jehová nuestra voz, y vio nuestra aflicción, y nuestro trabajo, y nuestra opresión:.

Y saconos Jehová de Egipto con mano fuerte, y con brazo extendido, y con grande espanto, y con señales y con milagros:.

Y trájonos a este lugar, y dionos esta tierra, tierra que fluye leche y miel..

Y ahora, he aquí, he traído las primicias del fruto de la tierra que me diste, oh Jehová. Y lo dejarás delante de Jehová tu Dios, e inclinarte has delante de Jehová tu Dios..

Y te alegrarás con todo el bien que Jehová tu Dios te hubiere dado a ti y a tu casa, tú y el Levita, y el extranjero que está en medio de ti..

Cuando hubieres acabado de diezmar todo el diezmo de tus frutos en el año tercero, el año del diezmo, darás también al Levita, al extranjero, al huérfano y a la viuda; y comerán en tus villas, y se saciarán..

Y dirás delante de Jehová tu Dios: Yo he sacado lo consagrado de mi casa, y también lo he dado al Levita, y al extranjero, y al huérfano, y a la viuda, conforme a todos tus mandamientos que me ordenaste: no he traspasado tus mandamientos, ni me he olvidado de ellos:.

No he comido de ello en mi luto, ni he sacado de ello en inmundicia, ni de ello he dado para mortuorio: he obedecido a la voz de Jehová mi Dios, he hecho conforme a todo lo que me has mandado..

Mira desde la morada de tu santidad, desde el cielo, y bendice a tu pueblo Israel, y a la tierra que nos has dado, como juraste a nuestros padres, tierra que fluye leche y miel..

Jehová tu Dios te manda hoy que cumplas estos estatutos y derechos; cuida, pues, de ponerlos por obra con todo tu corazón, y con toda tu alma..

A Jehová has ensalzado hoy para que te sea por Dios, y para andar en sus caminos, y para guardar sus estatutos y sus mandamientos y sus derechos, y para oír su voz:.

Y Jehová te ha ensalzado hoy para que le seas su peculiar pueblo, como él te lo he dicho, y para que guardes todos sus mandamientos;.

Y para ponerte alto sobre todas las gentes que hizo, para loor, y fama, y gloria; y para que seas pueblo santo a Jehová tu Dios, como él ha dicho..