Ester Capítulo 4

Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo se dirige a nosotros, sus hijos e hijas, y esto lo hace por medio de los textos sagrados recogidos en La Biblia. En ella podemos encontrar escrita su palabra y sus conocimientos para la humanidad. De nosotros depende leerla y tratar de captar toda la sapiencia que reside en sus palabras. En el capítulo 4 del Ester del Nuevo Testamento de la Sagrada Biblia encontramos confinadas auténticas dosis de conocimiento y bondad que el Padre proporcionó a los hombres para que así ellos llegaran a estar junto a Él.

El Ester del Nuevo Testamento consta de 10 capítulos. En cristianismo.info te ofrecemos la posibilidad de leer y estudiar lo que Dios Nuestro Señor quiso enseñarnos en el capítulo 4. Para una mejor lectura y comprensión el capítulo 4 del Ester está dividido en 17 versículos. De este modo es más simple leer y aprender de memoria la palabra Dios que está en los Cielos, de modo que esté a tu lado siempre y te sirva para no perder el rumbo de tu vida.

Dios Nuestro Señor jamás nos deja solos, es un padre misericordioso que nos guía. Por eso nos proporcionó su palabra que nos inspira y sirve de antorcha en los instantes más oscuros. En el capítulo 4 del Ester del Nuevo Testamento podrás encontrar sin dudarlo la solución a muchos de los interrogantes que te puedan surgir a lo largo de la vida. En el inicio de tu diálogo con el Creador, leer su palabra escrita en las Sagradas Escrituras, y dominar profundamente los 17 versículos del capítulo 4 del Ester te será de gran ayuda. De este modo te será posible tener siempre presente en tus oraciones cuál es el mandato de Dios.

Versículos del capítulo 4 del libro Ester

Luego que supo Mardochêo todo lo que se había hecho, rasgó sus vestidos, y vistiose de saco y de ceniza, y fuese por medio de la ciudad clamando con grande y amargo clamor..

Y vino hasta delante de la puerta del rey: porque no era lícito pasar adentro de la puerta del rey con vestido de saco..

Y en cada provincia y lugar donde el mandamiento del rey y su decreto llegaba, tenían los Judíos grande luto, y ayuno, y lloro, y lamentación: saco y ceniza era la cama de muchos..

Y vinieron las doncellas de Esther y sus eunucos, y dijéronselo: y la reina tuvo gran dolor, y envió vestidos para hacer vestir a Mardochêo, y hacerle quitar el saco de sobre él; mas él no los recibió..

Entonces Esther llamó a Atach, uno de los eunucos del rey, que él había hecho estar delante de ella, y mandolo a Mardochêo, con orden de saber qué era aquello, y por qué..

Salió pues Atach a Mardochêo, a la plaza de la ciudad que estaba delante de la puerta del rey..

Y Mardochêo le declaró todo lo que le había acontecido, y diole noticia de la plata que Amán había dicho que pesaría para los tesoros del rey por razón de los Judíos, para destruirlos..

Diole también la copia de la escritura del decreto que había sido dado en Susán para que fuesen destruidos, a fin de que la mostrara a Esther y se lo declarase, y le encargara que fuese al rey a suplicarle, y a pedir delante de él por su pueblo..

Y vino Atach, y contó a Esther las palabra de Mardochêo..

Entonces Esther dijo a Atach, y mandole decir a Mardochêo:.

Todos los siervos del rey, y el pueblo de las provincias del rey saben, que cualquier hombre o mujer que entra al rey al patio de adentro sin ser llamado, por una sola ley ha de morir: salvo aquel a quien el rey extendiere el cetro de oro, el cual vivirá: y yo no he sido llamada para entrar al rey estos treinta días..

Y dijeron a Mardochêo las palabras de Esther..

Entonces dijo Mardochêo que respondiesen a Esther: No pienses en tu alma, que escaparás en la casa del rey más que todos los Judíos:.

Porque si absolutamente callares en este tiempo, respiro y libertación tendrán los Judíos de otra parte; mas tú y la casa de tu padre pereceréis. ¿Y quién sabe si para esta hora te han hecho llegar al reino?.

Y Esther dijo que respondiesen a Mardochêo:.

Ve, y junta a todos los Judíos que se hallan en Susán, y ayunad por mí, y no comáis ni bebáis en tres días, noche ni día: yo también con mis doncellas ayunaré igualmente, y así entraré al rey, aunque no sea conforme a la ley; y si perezco, que perezca..

Entonces se fue Mardochêo, e hizo conforme a todo lo que le mandó Esther..