El versiculo Hechos, 3:26 de La Sagrada Biblia consiste en algo que debemos tener en todo momento presente de tal forma que podamos hacer una reflexión en torno a él. Acaso deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué trataba de proponernos Dios con el versículo Hechos, 3:26? ¿Cuáles son las ocasiones de nuestra vida diaria en que podemos llevar a la práctica lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Hechos, 3:26 de Las Sagradas Escrituras?
Discurrir y recapacitar en torno a lo que se refiere el versículo Hechos, 3:26 nos ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, por esa cuestión es bueno recurrir al versículo Hechos, 3:26 cada vez que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir y así saber cómo actuar o para traer la serenidad a nuestras almas.