1 Corintios Capítulo 11

Dios habla con nosotros, que somos fruto de su Creación, y lo hace mediante las Sagradas Escrituras que componen la Biblia. En la Sagrada Biblia es donde se encuentra escrita su palabra y sus lecciones para la humanidad. De nosotros, sus hijos, depende leerla y asimilar toda la sapiencia que se halla en sus palabras. En el capítulo 11 del 1 Corintios del Nuevo Testamento de la Biblia se hallan confinadas perlas de sabiduría que Dios obsequió a sus hijos e hijas con el objetivo de que ellos tuvieran la capacidad de estar al lado de Él.

El 1 Corintios del Nuevo Testamento consta de 16 capítulos. Ahora en cristianismo.info tienes la posibilidad de leer e interiorizar aquello que Nuestro Señor deseó mostrarnos en el capítulo 11. De modo que sea más fácil leerlo, analizarlo y comprenderlo el capítulo 11 del 1 Corintios está dividido en 34 versículos. De este modo es más fácil leer y aprender de memoria la palabra del Padre, de forma que esté a tu lado siempre y te sirva de brújula en la vida.

Nuestro Padre que todo lo puede nunca nos abandona, es un padre bondadoso que nos orienta. Por eso nos obsequió con su palabra que nos alumbra y sirve de Estrella Polar en los instantes más tenebrosos. En el capítulo 11 del 1 Corintios del Nuevo Testamento podrás encontrar con toda seguridad la clave a muchas de las preguntas que de pronto aparecen durante la vida. En el inicio de tu diálogo con Dios, el hecho de leer su palabra escrita en la Biblia, y entender en profundidad los 34 versículos del capítulo 11 del 1 Corintios te será muy útil. De esta manera podrás tener siempre presente en tus oraciones cuál es el mandato de Dios.

Versículos del capítulo 11 del libro 1 Corintios

Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo..

Y os alabo, hermanos, que en todo os acordáis de mi, y retenéis las instrucciones mías, de la manera que os enseñé..

Mas quiero que sepáis, que Cristo es la cabeza de todo varón; y el varón es la cabeza de la mujer; y Dios la cabeza de Cristo..

Todo varón que ora o profetiza cubierta la cabeza, afrenta su cabeza..

Mas toda mujer que ora o profetiza no cubierta su cabeza, afrenta su cabeza; porque lo mismo es que si se rayese..

Porque si la mujer no se cubre, trasquílese también: y si es deshonesto a la mujer trasquilarse o raerse, cúbrase..

Porque el varón no ha de cubrir la cabeza, porque es imagen y gloria de Dios: mas la mujer es gloria del varón..

Porque el varón no es de la mujer, sino la mujer del varón..

Porque tampoco el varón fue criado por causa de la mujer, sino la mujer por causa del varón..

Por lo cual, la mujer debe tener señal de potestad sobre su cabeza, por causa de los ángeles..

Mas ni el varón sin la mujer, ni la mujer sin el varón, en el Señor..

Porque como la mujer es del varón, así también el varón es por la mujer: empero todo de Dios..

Juzgad vosotros mismos: ¿es honesto orar la mujer a Dios no cubierta?.

La misma naturaleza ¿no os enseña que al hombre sea deshonesto criar cabello?.

Por el contrario, a la mujer criar el cabello le es honroso; porque en lugar de velo le es dado el cabello..

Con todo eso, si alguno parece ser contencioso, nosotros no tenemos tal costumbre, ni las iglesias de Dios..

Esto empero os denuncio, que no alabo, que no por mejor sino por peor os juntáis..

Porque lo primero, cuando os juntáis en la iglesia, oigo que hay entre vosotros disensiones; y en parte lo creo..

Porque preciso es que haya entre vosotros aun herejías, para que los que son probados se manifiesten entre vosotros..

Cuando pues os juntáis en uno, esto no es comer la cena del Señor..

Porque cada uno toma antes para comer su propia cena; y el uno tiene hambre, y el otro está embriagado..

Pues qué, ¿no tenéis casas en que comáis y bebáis? ¿ó menospreciáis la iglesia de Dios, y avergonzáis a los que no tienen? ¿Qué os diré? ¿os alabaré? En esto no os alabo..

Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan;.

Y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed: esto es mi cuerpo que por vosotros es partido: haced esto en memoria de mí..

Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre: haced esto todas las veces que bebiereis, en memoria de mí..

Porque todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que venga..

De manera que, cualquiera que comiere este pan o bebiere esta copa del Señor indignamente, será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor..

Por tanto, pruébese cada uno a sí mismo, y coma así de aquel pan, y beba de aquella copa..

Porque el que come y bebe indignamente, juicio come y bebe para sí, no discerniendo el cuerpo del Señor..

Por lo cual hay muchos enfermos y debilitados entre vosotros; y muchos duermen..

Que si nos examinásemos a nosotros mismos, cierto no seríamos juzgados..

Mas siendo juzgados, somos castigados del Señor, para que no seamos condenados con el mundo..

Así, que, hermanos míos, cuando os juntáis a comer, esperaos unos a otros..

Si alguno tuviere hambre, coma en su casa, porque no os juntéis para juicio. Las demás cosas ordenaré cuando llegare..