1 Reyes, 1:26 Versículo Bíblico

El versiculo 1 Reyes, 1:26 de La Sagrada Biblia consiste en algo que deberíamos tomar en todo momento en consideración con la finalidad de hacer una reflexión en torno a él.Seguramente deberíamos preguntarnos ¿Qué pretendía proponernos Nuestro Padre Todopoderoso con el versículo 1 Reyes, 1:26? ¿En qué ocasiones de nuestro día a día seremos capaces de hacer valer lo que aprendemos gracias al versículo 1 Reyes, 1:26 de Las Sagradas Escrituras?

El hecho de reflexionar en relación con el versículo 1 Reyes, 1:26 nos ayuda a ser mejores cristianos y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, ese es el motivo por el cual es oportuno recurrir al versículo 1 Reyes, 1:26 cuando creamos que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir y así saber en qué forma acturar o para traer la serenidad a nuestros corazones y almas.

Mas ni a mí tu siervo, ni a Sadoc sacerdote, ni a Benaía hijo de Joiada, ni a Salomón tu siervo, ha convidado.

Opiniones de nuestros usuarios

Ruben Rodriguez Rios

El versículo 1 Reyes, 1:26 es la palabra de Dios. Amén.

Maria Nieves Benitez Juan

El versículo 1 Reyes, 1:26 transmite el amor puro e infinito de Dios por sus hijos. Amén.

Alberto Anton Santana

El versículo 1 Reyes, 1:26 siempre me ha resonado en el interior de mi alma. Gracias Señor.