1 Samuel Capítulo 11

Dios, Nuestro Señor habla con nosotros, que somos sus hijos, y nos habla gracias a las Sagradas Escrituras que componen la Biblia. En ella es el lugar en donde se escribió su palabra y sus lecciones para la humanidad. De nosotros, sus hijos, depende leerla y tratar de captar toda la bondad y sabiduría que reside en sus palabras. En el capítulo 11 del 1 Samuel del Nuevo Testamento de la Sagrada Biblia es posible hallar confinadas perlas de sabiduría que Dios Creador regaló a los seres humanos para que ellos llegaran a acercarse a Él.

El 1 Samuel del Nuevo Testamento dispone de 31 capítulos. En esta web puedes leer aquello que Dios Nuestro Señor quiso mostrarnos en el capítulo 11. Para una mejor lectura y comprensión el capítulo 11 del 1 Samuel se halla fraccionado en 15 versículos. De esta forma es más simple leer y retener en la memoria la palabra Dios que está en los Cielos, para que así vaya contigo siempre y te sirva para trazar tu rumbo.

Dios Nuestro Señor jamás nos deja solos, es un padre misericordioso que nos orienta. Por ese motivo nos obsequió con su palabra que nos ilumina y sirve de linterna en los trances más oscuros. En el capítulo 11 del 1 Samuel del Nuevo Testamento podrás encontrar sin duda la solución a muchas de las cuestiones que a menudo se manifiestan durante la vida. Cuando vas a dar inicio a tu diálogo con el Altísimo, leer su palabra escrita en la Biblia, y dominar profundamente los 15 versículos del capítulo 11 del 1 Samuel te será extremadamente útil. De esta manera podrás tener siempre presente en tus rezos en qué consiste la palabra de Nuestro Señor.

Versículos del capítulo 11 del libro 1 Samuel

Y subió Naas Ammonita, y asentó campo contra Jabes de Galaad. Y todos los de Jabes dijeron a Naas: Haz alianza con nosotros, y te serviremos..

Y Naas Ammonita les respondió: Con esta condición haré alianza con vosotros, que a cada uno de todos vosotros saque el ojo derecho, y ponga esta afrenta sobre todo Israel..

Entonces los ancianos de Jabes le dijeron: Danos siete días, para que enviemos mensajeros a todos los términos de Israel; y si nadie hubiere que nos defienda, saldremos a ti..

Y llegando los mensajeros a Gabaa de Saúl, dijeron estas palabras en oídos del pueblo; y todo el pueblo lloró a voz en grito..

Y he aquí Saúl que venía del campo, tras los bueyes; y dijo Saúl: ¿Qué tiene el pueblo, que lloran? Y contáronle las palabras de los hombres de Jabes..

Y el espíritu de Dios arrebató a Saúl en oyendo estas palabras, y encendiose en ira en gran manera..

Y tomando un par de bueyes, cortolos en piezas, y enviolas por todos los términos de Israel por mano de mensajeros, diciendo: Cualquiera que no saliere en pos de Saúl y en pos de Samuel, así será hecho a sus bueyes. Y cayó temor de Jehová sobre el pueblo, y salieron como un solo hombre..

Y contoles en Bezec; y fueron los hijos de Israel trescientos mil, y treinta mil los hombres de Judá..

Y respondieron a los mensajeros que habían venido: Así diréis a los de Jabes de Galaad: Mañana en calentando el sol, tendréis salvamento. Y vinieron los mensajeros, y declaráronlo a los de Jabes, los cuales se holgaron..

Y los de Jabes dijeron: Mañana saldremos a vosotros, para que hagáis con nosotros todo lo que bien os pareciere..

Y el día siguiente dispuso Saúl el pueblo en tres escuadrones, y entraron en medio del real a la vela de la mañana, e hirieron a los Ammonitas hasta que el día calentaba: y los que quedaron fueron dispersos, tal que no quedaron dos de ellos juntos..

El pueblo entonces dijo a Samuel: ¿Quiénes son lo que decían: Reinará Saúl sobre nosotros? Dad nos esos hombres, y los mataremos..

Y Saúl dijo: No morirá hoy ninguno, porque hoy ha obrado Jehová salud en Israel..

Mas Samuel dijo al pueblo: Venid, vamos a Gilgal para que renovemos allí el reino..

Y fue todo el pueblo a Gilgal, e invistieron allí a Saúl por rey delante de Jehová en Gilgal. Y sacrificaron allí víctimas pacíficas delante de Jehová; y alegráronse mucho allí Saúl y todos los de Israel..