1 Timoteo Capítulo 6

Dios Padre habla con nosotros, sus hijos, y esto lo hace mediante la Sagrada Biblia. En ella podemos encontrar escrita su palabra y sus lecciones para la humanidad. En nuestra disposición está leerla y captar toda la sapiencia que hay en sus palabras. En el capítulo 6 del 1 Timoteo del Nuevo Testamento de la Sagrada Biblia se hallan confinadas intensas dosis de sabiduría y conocimiento que Dios otorgó a sus hijos para que ellos pudieran estar cerca de Él.

El 1 Timoteo del Nuevo Testamento consta de 6 capítulos. Ahora es posible leer lo que Dios quiso enseñarnos en el capítulo 6. Para una mejor lectura y comprensión el capítulo 6 del 1 Timoteo se encuentra fraccionado en 21 versículos. Así es más fácil leer y retener en la memoria la palabra Dios Todopoderoso, de modo que esté contigo siempre y te sirva para trazar tu rumbo.

Dios Nuestro Señor está siempre con nosotros, es un padre misericordioso que nos guía. Por eso nos obsequió con su palabra que nos alumbra y sirve de linterna en los trances más sombríos. En el capítulo 6 del 1 Timoteo del Nuevo Testamento podrás encontrar sin lugar a dudas la solución a muchos de los interrogantes que puedan aparecer en la vida. En el momento de comenzar tu diálogo con el Creador, el hecho de leer su palabra escrita en las Sagradas Escrituras, y dominar profundamente los 21 versículos del capítulo 6 del 1 Timoteo te será de mucha utilidad. Así podrás tener siempre presente en tus plegarias cuál es la verdadera palabra de Dios.

Versículos del capítulo 6 del libro 1 Timoteo

Todos los que están debajo del yugo de servidumbre, tengan a sus señores por dignos de toda honra, porque no sea blasfemado el nombre del Señor y la doctrina..

Y los que tienen amos fieles, no los tengan en menos, por ser hermanos; antes sírvanles mejor, por cuanto son fieles y amados, y partícipes del beneficio. Esto enseña y exhorta..

Si alguno enseña otra cosa, y no asiente a sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad;.

Es hinchado, nada sabe, y enloquece acerca de cuestiones y contiendas de palabras, de las cuales nacen envidias, pleitos, maledicencias, malas sospechas,.

Porfías de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que tienen la piedad por granjería: apártate de los tales..

Empero grande granjería es la piedad con contentamiento..

Porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar..

Así que, teniendo sustento y con qué cubrirnos, seamos contentos con esto..

Porque los que quieren enriquecerse, caen en tentación y lazo, y en muchas codicias locas y dañosas, que hunden a los hombres en perdición y muerte..

Porque el amor del dinero es la raíz de todos los males: el cual codiciando algunos, se descaminaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores..

Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, la caridad, la paciencia, la mansedumbre..

Pelea la buena batalla de la fe, echa mano de la vida eterna, a la cual asimismo eres llamado, habiendo hecho buena profesión delante de muchos testigos..

Te mando delante de Dios, que da vida a todas las cosas, y de Jesucristo, que testificó la buena profesión delante de Poncio Pilato,.

Que guardes el mandamiento sin mácula ni reprensión, hasta la aparición de nuestro Señor Jesucristo:.

La cual a su tiempo mostrará el Bienaventurado y solo Poderoso, Rey de reyes, y Señor de señores;.

Quien sólo tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible; a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver: al cual sea la honra y el imperio sempiterno. Amén..

A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en la incertidumbre de las riquezas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia de que gocemos:.

Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, que con facilidad comuniquen;.

Atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano a la vida eterna..

Oh Timoteo, guarda lo que se te ha encomendado, evitando las profanas pláticas de vanas cosas, y los argumentos de la falsamente llamada ciencia:.

La cual profesando algunos, fueron descaminados acerca de la fe. La gracia sea contigo. Amén. La primera epístola a Timoteo fue escrita de Laodicea, que es metrópoli de la Frigia Pacatiana..