Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo se dirige a nosotros, sus hijos creados a su imagen y semejanza, y lo hace a través de la Biblia. En ella está escrita su palabra y sus enseñanzas para la humanidad. Nosotros somos quienes decidimos si leerla y captar toda la bondad y sabiduría que se encuentra en sus palabras. En el capítulo 15 del 2 Samuel del Nuevo Testamento de la Biblia podemos encontrar resguardadas intensas dosis de sabiduría y conocimiento que Dios entregó a los hombres para que ellos tuvieran la capacidad de estar cerca de Él.
El 2 Samuel del Nuevo Testamento consta de 24 capítulos. En esta web es posible leer y aprender lo que Nuestro Señor se propuso enseñarnos en el capítulo 15. Para una mejor lectura y comprensión el capítulo 15 del 2 Samuel está fraccionado en 37 versículos. De esta forma es más fácil leer y memorizar la palabra del Señor, para que así te acompañe siempre y te sirva de orientación y guía.
Nuestro Padre Bondadoso está siempre junto nosotros, es un padre benévolo que nos orienta. Por ese motivo nos brindó su palabra que nos alumbra y sirve de antorcha en los periodos más oscuros. En el capítulo 15 del 2 Samuel del Nuevo Testamento encontrarás con toda seguridad la respuesta a muchos de los interrogantes que de pronto aparecen durante la vida. A la hora de iniciar tu diálogo con Nuestro Señor, leer su palabra escrita en los textos que componen la Biblia, y comprender en profundidad los 37 versículos del capítulo 15 del 2 Samuel te será de gran utilidad. Así podrás tener siempre presente en tus rezos cuál es la palabra de Dios.
Aconteció después de esto, que Absalom se hizo de carros y caballos, y cincuenta que corriesen delante de él..
Y levantábase Absalom de mañana, y poníase a un lado del camino de la puerta; y a cualquiera que tenía pleito y venía al rey a juicio, Absalom le llamaba a sí, y decíale: ¿De qué ciudad eres? Y él respondía: Tu siervo es de una de las tribus de Israel..
Entonces Absalom le decía: Mira, tus palabras son buenas y justas: mas no tienes quien te oiga por el rey..
Y decía Absalom: ¡Quién me pusiera por juez en la tierra, para que viniesen a mí todos los que tienen pleito o negocio, que yo les haría justicia!.
Y acontecía que, cuando alguno se llegaba para inclinarse a él, él extendía su mano, y lo tomaba, y lo besaba..
Y de esta manera hacía con todo Israel que venía al rey a juicio: y así robaba Absalom el corazón de los de Israel..
Y al cabo de cuarenta años aconteció que Absalom dijo al rey: Yo te ruego me permitas que vaya a Hebrón, a pagar mi voto que he prometido a Jehová:.
Porque tu siervo hizo voto cuando estaba en Gessur en Siria, diciendo: Si Jehová me volviere a Jerusalem, yo serviré a Jehová..
Y el rey dijo: Ve en paz. Y él se levantó, y se fue a Hebrón..
Empero envió Absalom espías por todas las tribus de Israel, diciendo: Cuando oyereis el sonido de la trompeta, diréis: Absalom reina en Hebrón..
Y fueron con Absalom doscientos hombres de Jerusalem por él convidados, los cuales iban en su sencillez, sin saber nada..
También envió Absalom por Achitophel Gilonita, del consejo de David, a Gilo su ciudad, mientras hacía sus sacrificios. Y la conjuración vino a ser grande, pues se iba aumentando el pueblo con Absalom..
Y vino el aviso a David, diciendo: El corazón de todo Israel va tras Absalom..
Entonces David dijo a todos sus siervos que estaban con él en Jerusalem: Levantaos, y huyamos, porque no podremos escapar delante de Absalom; daos priesa a partir, no sea que apresurándose él nos alcance, y arroje el mal sobre nosotros, y hiera la ciudad a filo de espada..
Y los siervos del rey dijeron al rey: He aquí, tus siervos están prestos a todo lo que nuestro señor el rey eligiere..
El rey entonces salió, con toda su familia en pos de él. Y dejó el rey diez mujeres concubinas para que guardasen la casa..
Salió pues el rey con todo el pueblo que le seguía, y paráronse en un lugar distante..
Y todos sus siervos pasaban a su lado, con todos los Ceretheos y Peletheos; y todos los Getheos, seiscientos hombres que habían venido a pie desde Gath, iban delante del rey..
Y dijo el rey a Ittai Getheo: ¿Para qué vienes tú también con nosotros? vuélvete y quédate con el rey; porque tú eres extranjero, y desterrado también de tu lugar..
¿Ayer viniste, y téngote de hacer hoy que mudes lugar para ir con nosotros? Yo voy como voy: tú vuélvete, y haz volver a tus hermanos: en ti haya misericordia y verdad..
Y respondió Ittai al rey, diciendo: Vive Dios, y vive mi señor el rey, que, o para muerte o para vida, donde mi señor el rey estuviere, allí estará también tu siervo..
Entonces David dijo a Ittai: Ven pues, y pasa. Y pasó Ittai Getheo, y todos sus hombres, y toda su familia..
Y todo el país lloró en alta voz; pasó luego toda la gente el torrente de Cedrón; asimismo pasó el rey, y todo el pueblo pasó, al camino que va al desierto..
Y he aquí, también iba Sadoc, y con él todos los Levitas que llevaban el arca del pacto de Dios; y asentaron el arca del pacto de Dios. Y subió Abiathar después que hubo acabado de salir de la ciudad todo el pueblo..
Pero dijo el rey a Sadoc: Vuelve el arca de Dios a la ciudad; que si yo hallare gracia en los ojos de Jehová, él me volverá, y me hará ver a ella y a su tabernáculo:.
Y si dijere: No me agradas: aquí estoy, haga de mí lo que bien le pareciere..
Dijo aún el rey a Sadoc sacerdote: ¿No eres tú el vidente? Vuélvete en paz a la ciudad; y con vosotros vuestros dos hijos, tu hijo Ahimaas, y Jonathán hijo de Abiathar..
Mirad, yo me detendré en los campos del desierto, hasta que venga respuesta de vosotros que me dé aviso..
Entonces Sadoc y Abiathar volvieron el arca de Dios a Jerusalem; y estuviéronse allá..
Y David subió la cuesta de las olivas; y subió la llorando, llevando la cabeza cubierta, y los pies descalzos. También todo el pueblo que tenía consigo cubrió cada uno su cabeza, y subieron llorando así como subían..
Y dieron aviso a David, diciendo: Achitophel está entre los que conspiraron con Absalom. Entonces dijo David: Entontece ahora, oh Jehová, el consejo de Achitophel..
Y como David llegó a la cumbre del monte para adorar allí a Dios, he aquí Husai Arachîta que le salió al encuentro, trayendo rota su ropa, y tierra sobre su cabeza..
Y díjole David: Si pasares conmigo, serme has de carga;.
Mas si volvieres a la ciudad, y dijeres a Absalom: Rey, yo seré tu siervo; como hasta aquí he sido siervo de tu padre, así seré ahora siervo tuyo, entonces tú me disiparás el consejo de Achitophel..
¿No estarán allí contigo Sadoc y Abiathar sacerdotes? Por tanto, todo lo que oyeres en la casa del rey, darás aviso de ello a Sadoc y a Abiathar sacerdotes..
Y he aquí que están con ellos sus dos hijos, Ahimaas el de Sadoc, y Jonathán el de Abiathar: por mano de ellos me enviaréis aviso de todo lo que oyereis..
Así se vino Husai amigo de David a la ciudad; y Absalom entró en Jerusalem..