2 Samuel Capítulo 18

Dios, Nuestro Señor se dirige a nosotros, sus hijos creados a su imagen y semejanza, y nos habla por mediación de la Sagrada Biblia. En la Sagrada Biblia se encuentra escrita su doctrina y sus enseñanzas para la humanidad. De nosotros, sus hijos, depende leerla y entender toda la sapiencia que reside en sus palabras. En el capítulo 18 del 2 Samuel del Nuevo Testamento de la Sagrada Biblia permanecen confinadas perlas de sabiduría que Dios Padre regaló a los hombres para que ellos pudieran estar al lado de Él.

El 2 Samuel del Nuevo Testamento dispone de 24 capítulos. Ahora en cristianismo.info tienes la posibilidad de leer y aprehender aquello que Dios Nuestro Señor quiso revelarnos en el capítulo 18. Para que lo puedas leer y comprender mejor el capítulo 18 del 2 Samuel está dividido en 33 versículos. Así es más fácil leer y recordar la palabra del Señor, de forma que vaya contigo siempre y te sirva como una luz en tu camino.

Nuestro Padre Todopoderoso es quien jamás nos abandonará a pesar de las circunstancias, es un padre bondadoso que nos aconseja. Por eso nos regaló su palabra que nos orienta y sirve de antorcha en los instantes más tenebrosos. En el capítulo 18 del 2 Samuel del Nuevo Testamento hallarás sin lugar a dudas la respuesta a muchas de las dudas que a menudo se manifiestan a lo largo de la vida. Cuando vas a dar inicio a tu diálogo con el Padre, leer su palabra escrita en la Biblia, y conocer en profundidad los 33 versículos del capítulo 18 del 2 Samuel te será extremadamente útil. De esta forma tendrás siempre presente en tus oraciones en qué consiste el mandato de Nuestro Señor.

Versículos del capítulo 18 del libro 2 Samuel

David pues revistó el pueblo que tenía consigo, y puso sobre ellos tribunos y centuriones..

Y consignó la tercera parte del pueblo al mando de Joab, y otra tercera al mando de Abisai, hijo de Sarvia, hermano de Joab, y la otra tercera parte al mando de Ittai Getheo. Y dijo el rey al pueblo: Yo también saldré con vosotros..

Mas el pueblo dijo: No saldrás; porque si nosotros huyéremos, no harán caso de nosotros; y aunque la mitad de nosotros muera, no harán caso de nosotros: mas tú ahora vales tanto como diez mil de nosotros. Será pues mejor que tú nos des ayuda desde la ciudad..

Entonces el rey les dijo: Yo haré lo que bien os pareciere. Y púsose el rey a la entrada de la puerta, mientras salía todo el pueblo de ciento en ciento y de mil en mil..

Y el rey mandó a Joab y a Abisai y a Ittai, diciendo: Tratad benignamente por amor de mí al mozo Absalom. Y todo el pueblo oyó cuando dio el rey orden acerca de Absalom a todos los capitanes..

Salió pues el pueblo al campo contra Israel, y diose la batalla en el bosque de Ephraim;.

Y allí cayó el pueblo de Israel delante de los siervos de David, e hízose una gran matanza de veinte mil hombres..

Y derramándose allí el ejército por la haz de toda la tierra, fueron más los que consumió el bosque de los del pueblo, que los que consumió el cuchillo aquel día..

Y encontrose Absalom con los siervos de David: e iba Absalom sobre un mulo, y el mulo se entró debajo de un espeso y grande alcornoque, y asiósele la cabeza al alcornoque, y quedó entre el cielo y la tierra; pues el mulo en que iba pasó delante..

Y viéndolo uno, avisó a Joab, diciendo: He aquí que he visto a Absalom colgado de un alcornoque..

Y Joab respondió al hombre que le daba la nueva: Y viéndolo tú, ¿por qué no le heriste luego allí echándole a tierra? y sobre mí, que te hubiera dado diez siclos de plata, y un talabarte..

Y el hombre dijo a Joab: Aunque me importara en mis manos mil siclos de plata, no extendiera yo mi mano contra el hijo del rey; porque nosotros lo oímos cuando el rey te mandó a ti y a Abisai y a Ittai, diciendo: Mirad que ninguno toque en el joven Absalom..

Por otra parte, habría yo hecho traición contra mi vida (pues que al rey nada se le esconde), y tú mismo estarías en contra..

Y respondió Joab: No es razón que yo te ruegue. Y tomando tres dardos en sus manos, hincolos en el corazón de Absalom, que aun estaba vivo en medio del alcornoque..

Cercándolo luego diez mancebos escuderos de Joab, hirieron a Absalom, y acabáronle..

Entonces Joab tocó la corneta, y el pueblo se volvió de seguir a Israel, porque Joab detuvo al pueblo..

Tomando después a Absalom, echáronle en un gran hoyo en el bosque, y levantaron sobre él un muy grande montón de piedras; y todo Israel huyó, cada uno a sus estancias..

Y había Absalom en su vida tomado y levantádose una columna, la cual está en el valle del rey; porque había dicho: Yo no tengo hijo que conserve la memoria de mi nombre. Y llamó aquella columna de su nombre: y así se llamó el Lugar de Absalom, hasta hoy..

Entonces Ahimaas hijo de Sadoc dijo: ¿Correré ahora, y daré las nuevas al rey de cómo Jehová ha defendido su causa de la mano de sus enemigos?.

Y respondió Joab: Hoy no llevarás las nuevas: las llevarás otro día: no darás hoy la nueva, porque el hijo del rey es muerto..

Y Joab dijo a Cusi: Ve tú, y di al rey lo que has visto. Y Cusi hizo reverencia a Joab, y corrió..

Entonces Ahimaas hijo de Sadoc tornó a decir a Joab: Sea lo que fuere, yo correré ahora tras Cusi. Y Joab dijo: Hijo mío, ¿para qué has tú de correr, pues que no hallarás premio por las nuevas?.

Mas él respondió: Sea lo que fuere, yo correré. Entonces le dijo: Corre. Corrió pues Ahimaas por el camino de la llanura, y pasó delante de Cusi..

Estaba David a la sazón sentado entre las dos puertas; y el atalaya había ido al terrado de sobre la puerta en el muro, y alzando sus ojos, miró, y vio a uno que corría solo..

El atalaya dio luego voces, e hízolo saber al rey. Y el rey dijo: Si es solo, buenas nuevas trae. En tanto que él venía acercándose,.

Vio el atalaya otro que corría; y dio voces el atalaya al portero, diciendo: He aquí otro hombre que corre solo. Y el rey dijo: Este también es mensajero..

Y el atalaya volvió a decir: Paréceme el correr del primero como el correr de Ahimaas hijo de Sadoc. Y respondió el rey: Ese es hombre de bien, y viene con buena nueva..

Entonces Ahimaas dijo en alta voz al rey: Paz. E inclinose a tierra delante del rey, y dijo: Bendito sea Jehová Dios tuyo, que ha entregado a los hombres que habían levantado sus manos contra mi señor el rey..

Y el rey dijo: ¿El mozo Absalom tiene paz? Y Ahimaas respondió: Vi yo un grande alboroto cuando envió Joab al siervo del rey y a mí tu siervo; mas no sé qué era..

Y el rey dijo: Pasa, y ponte allí. Y él pasó, y parose..

Y luego vino Cusi, y dijo: Reciba nueva mi señor el rey, que hoy Jehová ha defendido tu causa de la mano de todos los que se habían levantado contra ti..

El rey entonces dijo a Cusi: ¿El mozo Absalom tiene paz? Y Cusi respondió: Como aquel mozo sean los enemigos de mi señor el rey, y todos los que se levantan contra ti para mal..

Entonces el rey se turbó, y subiose a la sala de la puerta, y lloró; y yendo, decía así: ¡Hijo mío Absalom, hijo mío, hijo mío Absalom! ¡Quién me diera que muriera yo en lugar de ti, Absalom, hijo mío, hijo mío!.