Dios, Nuestro Señor se nos revela a nosotros, sus hijos creados a su imagen y semejanza, y esto lo hace mediante la Sagrada Biblia. En ella está escrita su doctrina y sus enseñanzas para la humanidad. De nosotros, sus hijos, depende leerla y aprehender toda la bondad y sabiduría que hay en sus palabras. En el capítulo 18 del Isaías del Nuevo Testamento de la Sagrada Biblia están resguardadas auténticas dosis de conocimiento y bondad que Dios regaló a los seres humanos para que así ellos tuvieran la capacidad de estar junto a Él.
El Isaías del Nuevo Testamento tiene 66 capítulos. Ahora en nuestra web tienes la posibilidad de leer e interiorizar aquello que Dios se propuso mostrarnos en el capítulo 18. Para que la lectura y la comprensión sean más fáciles el capítulo 18 del Isaías se halla dividido en 7 versículos. De esta manera es más sencillo leer y memorizar la palabra Dios que está en los Cielos, para que esté contigo siempre y te sirva para no perder el rumbo de tu vida.
Dios Nuestro Señor no nos deja nunca solos, es un padre compasivo que nos aconseja. Ese fue el motivo por el cual nos obsequió con su palabra que nos orienta y sirve de fanal en los instantes más oscuros. En el capítulo 18 del Isaías del Nuevo Testamento podrás encontrar sin duda la respuesta a muchas de las cuestiones que de pronto aparecen durante la vida. A la hora de iniciar tu diálogo con el Padre, haber leído su palabra escrita en la Biblia, y conocer en profundidad los 7 versículos del capítulo 18 del Isaías te será de mucha utilidad. Así podrás tener siempre presente en tus oraciones en qué consiste la palabra de Dios.
¡Ay de la tierra que hace sombra con las alas, que está tras los ríos de Etiopía;.
Que envía mensajeros por la mar, y en navíos de junco sobre las aguas! Andad, ligeros mensajeros, a la gente tirada y repelada, al pueblo asombroso desde su principio y después; gente harta de esperar y hollada, cuya tierra destruyeron los ríos..
Vosotros, todos los moradores del mundo y habitantes de la tierra, cuando levantará bandera en los montes, la veréis; y oiréis cuando tocará trompeta..
Porque Jehová me dijo así: Reposareme, y miraré desde mi morada, como sol claro después de la lluvia, como nube de rocío en el calor de la tierra..
Porque antes de la siega, cuando el fruto fuere perfecto, y pasada la flor fueren madurando los frutos, entonces podará con podaderas los ramitos, y cortará y quitará las ramas..
Y serán dejados todos a las aves de los montes, y a las bestias de la tierra; sobre ellos tendrán el verano las aves, e invernarán todas las bestias de la tierra..
En aquel tiempo será traído presente Jehová de los ejércitos, el pueblo tirado y repelado, pueblo asombroso desde su principio y después; gente harta de esperar y hollada, cuya tierra destruyeron los ríos; al lugar del nombre de Jehová de los ejércitos, al monte de Sion..