Dios, Nuestro Señor que está en los Cielos se comunica con nosotros, sus hijos creados a su imagen y semejanza, y lo hace por mediación de la Biblia. En la Sagrada Biblia es el lugar en donde se escribió su doctrina y sus lecciones para la humanidad. En nuestra mano está leerla y asimilar toda la bondad y sabiduría que hay en sus palabras. En el capítulo 20 del Isaías del Nuevo Testamento de la Sagrada Biblia se hallan escondidas porciones de bondad y sabiduría que Dios Nuestro Señor entregó a sus hijos e hijas para que ellos tuvieran la capacidad de estar junto a Él.
El Isaías del Nuevo Testamento está compuesto por 66 capítulos. Ahora te ofrecemos la posibilidad de leer e interiorizar lo que Dios se propuso mostrarnos en el capítulo 20. Para que sea más fácil leerlo y comprenderlo el capítulo 20 del Isaías se halla fraccionado en 6 versículos. De este modo es más sencillo leer y retener en la memoria la palabra de Dios, de modo que esté contigo siempre y te sirva de orientación y guía.
Dios Nuestro Señor está siempre junto nosotros, es un padre compasivo que nos guía. Por eso nos obsequió con su palabra que nos orienta y sirve de antorcha en los periodos más tenebrosos. En el capítulo 20 del Isaías del Nuevo Testamento podrás encontrar sin duda la respuesta a muchos de los interrogantes que de pronto aparecen a lo largo de la vida. A la hora de iniciar tu diálogo con el Padre, leer su palabra escrita en los textos que componen la Biblia, y conocer en profundidad los 6 versículos del capítulo 20 del Isaías te será de mucha ayuda. De esta forma podrás tener siempre presente en tus oraciones cuál es el mandato de Dios.
En el año que vino Thartán a Asdod, cuando le envió Sargón rey de Asiria, y peleó contra Asdod y la tomó;.
En aquel tiempo habló Jehová por Isaías hijo de Amoz, diciendo: Ve, y quita el saco de tus lomos, y descalza los zapatos de tus pies. E hízolo así, andando desnudo y descalzo..
Y dijo Jehová: De la manera que anduvo mi siervo Isaías desnudo y descalzo tres años, señal y pronóstico sobre Egipto y sobre Etiopía;.
Así llevará el rey de Asiria la cautividad de Egipto y la transmigración de Etiopía, de mozos y de viejos, desnuda y descalza, y descubiertas las nalgas para vergüenza de Egipto..
Y se turbarán y avergonzarán de Etiopía su esperanza, y de Egipto su gloria..
Y dirá en aquel día el morador de esta isla: Mirad qué tal fue nuestra esperanza, donde nos acogimos por socorro para ser libres de la presencia del rey de Asiria: ¿y cómo escaparemos?.