Dios se comunica con nosotros, que somos sus hijos, y lo hace mediante la Biblia. En ella podemos encontrar escrita su palabra y sus conocimientos para la humanidad. En nuestra mano está leerla y aprehender toda la bondad y sabiduría que se halla en sus palabras. En el capítulo 3 del Isaías del Nuevo Testamento de los textos de las Biblia están escondidas perlas de sabiduría que el Padre regaló a los hombres con el objetivo de que ellos llegaran a estar al lado de Él.
El Isaías del Nuevo Testamento consta de 66 capítulos. En cristianismo.info tienes la posibilidad de leer lo que Nuestro Señor se propuso enseñarnos en el capítulo 3. Para facilitar su lectura y comprensión el capítulo 3 del Isaías se halla dividido en 26 versículos. De esta manera es más simple leer y aprender de memoria la palabra de Dios, de forma que vaya contigo siempre y te sirva de guía.
Nuestro Padre Todopoderoso no nos deja nunca solos, es un padre benévolo que nos guía. Por eso nos regaló su palabra que nos alumbra y sirve de faro en los periodos más oscuros. En el capítulo 3 del Isaías del Nuevo Testamento podrás encontrar sin duda la solución a muchas de las dudas que a menudo se manifiestan en la vida. A la hora de iniciar tu diálogo con Dios, el hecho de leer su palabra escrita en los textos que componen la Biblia, y entender en profundidad los 26 versículos del capítulo 3 del Isaías te será muy útil. De este modo tendrás siempre presente en tus rezos cuál es la verdadera palabra de Dios.
Porque he aquí que el Señor Jehová de los ejércitos quita de Jerusalem y de Judá el sustentador y el fuerte, todo sustento de pan y todo socorro de agua;.
El valiente y el hombre de guerra, el juez y el profeta, el adivino y el anciano;.
El capitán de cincuenta, y el hombre de respeto, y el consejero, y el artífice excelente, y el hábil orador..
Y pondreles mozos por príncipes, y muchachos serán sus señores..
Y el pueblo hará violencia los unos a los otros, cada cual contra su vecino: el mozo se levantará contra el viejo, y el villano contra el noble..
Cuando alguno trabare de su hermano, de la familia de su padre, y le dijere, Que vestir tienes, tú serás nuestro príncipe, y sea en tu mano esta ruina;.
Él jurará aquel día, diciendo: No tomaré ese cuidado; porque en mi casa ni hay pan, ni qué vestir: no me hagáis príncipe del pueblo..
Pues arruinada está Jerusalem, y Judá ha caído; porque la lengua de ellos y sus obras han sido contra Jehová, para irritar los ojos de su majestad..
La apariencia del rostro de ellos los convence: que como Sodoma predican su pecado, no lo disimulan. ¡Ay del alma de ellos! porque allegaron mal para sí..
Decid al justo que le irá bien: porque comerá de los frutos de sus manos..
¡Ay del impío! mal le irá: porque según las obras de sus manos le será pagado..
Los exactores de mi pueblo son muchachos, y mujeres se enseñorearon de él. Pueblo mío, los que te guían te engañan, y tuercen la carrera de tus caminos..
Jehová está en pie para litigar, y está para juzgar los pueblos..
Jehová vendrá a juicio contra los ancianos de su pueblo y contra sus príncipes; porque vosotros habéis devorado la viña, y el despojo del pobre está en vuestras casas..
¿Qué pensáis vosotros que majáis mi pueblo, y moléis las caras de los pobres? dice el Señor Jehová de los ejércitos..
Asimismo dice Jehová: Por cuanto las hijas de Sion se ensoberbecen, y andan cuellierguidas y los ojos descompuestos; cuando andan van danzando, y haciendo son con los pies:.
Por tanto, pelará el Señor la mollera de las hijas de Sion, y Jehová descubrirá sus vergüenzas..
Aquel día quitará el Señor el atavío de los calzados, y las redecillas, y las lunetas;.
Los collares, y los joyeles, y los brazaletes;.
Las escofietas, y los atavíos de las piernas, los partidores del pelo, los pomitos de olor, y los zarcillos;.
Los anillos, y los joyeles de las narices;.
Las ropas de remuda, los mantoncillos, los velos, y los alfileres;.
Los espejos, los pañizuelos, las gasas, y los tocados..
Y será que en lugar de los perfumes aromáticos vendrá hediondez; y desgarrón en lugar de cinta; y calvez en lugar de la compostura del cabello; y en lugar de faja ceñimiento de saco; y quemadura en vez de hermosura..
Tus varones caerán a cuchillo, y tu fuerza en la guerra..
Sus puertas se entristecerán y enlutarán, y ella, desamparada, sentarase en tierra..