Dios, Nuestro Señor que está en los Cielos se nos revela a nosotros, creados a su imagen y semejanza, y lo hace por medio de las Sagradas Escrituras que componen la Biblia. En la Sagrada Biblia se encuentra escrita su palabra y sus conocimientos para la humanidad. De nosotros depende leerla y comprender toda la sapiencia que reside en sus palabras. En el capítulo 44 del Isaías del Nuevo Testamento de los textos de las Biblia encontramos encerradas perlas de sabiduría que Dios Creador entregó a los hombres para que así ellos tuvieran la capacidad de estar junto a Él.
El Isaías del Nuevo Testamento tiene 66 capítulos. En cristianismo.info te ofrecemos la posibilidad de leer y estudiar aquello que Nuestro Señor deseó enseñarnos en el capítulo 44. Para que la lectura y la comprensión sean más fáciles el capítulo 44 del Isaías se halla fraccionado en 28 versículos. De esta forma es más simple leer y retener en la memoria la palabra del Padre, de modo que vaya contigo siempre y te sirva para trazar tu rumbo.
Nuestro Amado Padre Celestial siempre está a nuestro lado, es un padre justo que nos orienta. Por ese motivo nos brindó su palabra que nos inspira y sirve de fanal en los momentos más tenebrosos. En el capítulo 44 del Isaías del Nuevo Testamento descubrirás con toda seguridad la respuesta a gran cantidad de dilemas que se puedan manifestar durante la vida. En el inicio de tu diálogo con Dios, haber leído su palabra escrita en la Biblia, y dominar en profundidad los 28 versículos del capítulo 44 del Isaías te será extremadamente útil. Así te será posible tener siempre presente en tus plegarias en qué consiste el mandato de Dios Padre que está en los Cielos.
Ahora pues oye, Jacob, siervo mío, y tú, Israel, a quien yo escogí..
Así dice Jehová, Hacedor tuyo, y el que te formó desde el vientre, el cual te ayudará: No temas, siervo mío Jacob, y tú, Jeshurun, a quien yo escogí..
Porque yo derramaré aguas sobre el secadal, y ríos sobre la tierra árida: mi espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos:.
Y brotarán entre hierba, como sauces junto a las riberas de las aguas..
Este dirá: Yo soy de Jehová; el otro se llamará del nombre de Jacob; y otro escribirá con su mano, A Jehová, y se apellidará con el nombre de Israel..
Así dice Jehová, Rey de Israel, y su Redentor, Jehová de los ejércitos: Yo el primero, y yo el postrero, y fuera de mí no hay Dios..
¿Y quién llamará como yo, y denunciará esto, y lo ordenará por mí, desde que hice el pueblo antiguo? Anúncienles lo que viene, y lo que está por venir..
No temáis, ni os amedrentéis: ¿no te lo hice oír desde antiguo, y te lo dije? Luego vosotros sois mis testigos. No hay Dios sino yo. No hay Fuerte: no conozco ninguno..
Los formadores de imágenes de talla, todos ellos son vanidad, y lo más precioso de ellos para nada es útil; y ellos mismos para su confusión son testigos, que ellos ni ven ni entienden..
¿Quién formó un dios, o quién fundó una estatua que para nada es de provecho?.
He aquí que todos sus compañeros serán avergonzados, porque los mismos artífices son de los hombres. Todos ellos se juntarán, estarán, se asombrarán, y serán avergonzados a una..
El herrero tomará la tenaza, obrará en las ascuas, darale forma con los martillos, y trabajará en ella con la fuerza de su brazo: tiene luego hambre, y le faltan las fuerzas; no beberá agua, y se desmaya..
El carpintero tiende la regla, señala aquélla con almagre, lábrala con los cepillos, dale figura con el compás, hácela en forma de varón, a semejanza de hombre hermoso, para estar en casa..
Cortarase cedros, y tomará encina y alcornoque, y entre los árboles del bosque se esforzará; plantará pino, que se críe con la lluvia..
De él se servirá luego el hombre para quemar, y tomará de ellos para calentarse; encenderá también el horno, y cocerá panes: hará además un dios, y lo adorará; fabricará un ídolo, y arrodillarase delante de él..
Parte del leño quemará en el fuego; con parte de él comerá carne, aderezará asado, y se saciará; después se calentará, y dirá: ¡Oh! heme calentado, he visto el fuego;.
Y torna su sobrante en un dios, en su escultura; humíllase delante de ella, adórala, y ruégale diciendo: Líbrame, que mi dios eres tú..
No supieron ni entendieron: porque encostrados están sus ojos para no ver, y su corazón para no entender..
No discurre para consigo, no tiene sentido ni entendimiento para decir: Parte de esto quemé en el fuego, y sobre sus brasas cocí pan, asé carne, y comila; ¿he de tornar en una abominación lo restante de ello? ¿delante de un tronco de árbol tengo de humillarme?.
De ceniza se apacienta; su corazón engañado le desvía, para que no libre su alma, ni diga: ¿No hay una mentira a mi mano derecha?.
Acuérdate de estas cosas, oh Jacob, e Israel, pues que tú mi siervo eres: Yo te formé; siervo mío eres tú: Israel, no me olvides..
Yo deshice como a nube tus rebeliones, y como a niebla tus pecados: tórnate a mí, porque yo te redimí..
Cantad loores, oh cielos, porque Jehová lo hizo; gritad con júbilo, lugares bajos de la tierra; prorrumpid, montes, en alabanza; bosque, y todo árbol que en él está: porque Jehová redimió a Jacob, y en Israel será glorificado..
Así dice Jehová, tu Redentor, y formador tuyo desde el vientre: Yo Jehová, que lo hago todo, que extiendo solo los cielos, que extiendo la tierra por mí mismo;.
Que deshago las señales de los adivinos, y enloquezco a los agoreros; que hago tornar atrás los sabios, y desvanezco su sabiduría;.
Que despierta la palabra de su siervo, y cumple el consejo de sus mensajeros; que dice a Jerusalem: Serás habitada; y a las ciudades de Judá: Reedificadas serán, y sus ruinas levantaré;.
Que dice al profundo: Sécate, y tus ríos haré secar;.
Que dice de Ciro: Es mi pastor, y cumplirá todo lo que yo quiero, en diciendo a Jerusalem, Serás edificada; y al templo: Serás fundado..