Jeremías Capítulo 11

Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo se dirige a nosotros, sus hijos e hijas, y nos habla gracias a la Biblia. En la Biblia es donde se encuentra escrita su doctrina y sus enseñanzas para la humanidad. De nosotros depende leerla y entender toda la bondad y sabiduría que se halla en sus palabras. En el capítulo 11 del Jeremías del Nuevo Testamento de la Sagrada Biblia podemos encontrar confinadas perlas de sabiduría que el Padre proporcionó a los seres humanos con el objetivo de que ellos pudieran acercarse a Él.

El Jeremías del Nuevo Testamento está formado por 52 capítulos. Ahora tienes la posibilidad de leer y aprehender lo que Dios Nuestro Señor deseó mostrarnos en el capítulo 11. De modo que sea más fácil leerlo, analizarlo y comprenderlo el capítulo 11 del Jeremías se halla dividido en 23 versículos. De este modo es más sencillo leer y memorizar la palabra del Señor, de modo que te acompañe siempre y te sirva para guiarte.

Nuestro Padre Bondadoso está siempre con nosotros, es un padre justo que nos aconseja. Por ese motivo nos regaló su palabra que nos ilumina y sirve de antorcha en los trances más oscuros. En el capítulo 11 del Jeremías del Nuevo Testamento podrás encontrar sin dudarlo la clave a muchas de las cuestiones que puedan aparecer a lo largo de la vida. Al principio de tu diálogo con Nuestro Señor, haber leído su palabra escrita en la Sagrada Biblia, y comprender en profundidad los 23 versículos del capítulo 11 del Jeremías te será de mucha utilidad. De esta forma te será posible tener siempre presente en tus plegarias en qué consiste la palabra de Dios Todopoderoso.

Versículos del capítulo 11 del libro Jeremías

Palabra que fue de Jehová, a Jeremías, diciendo:.

Oíd las palabras de este pacto, y hablad a todo varón de Judá, y a todo morador de Jerusalem..

Y les dirás tú: Así dijo Jehová Dios de Israel: Maldito el varón que no obedeciere las palabras de este pacto,.

El cual mandé a vuestros padres el día que los saqué de la tierra de Egipto, del horno de hierro, diciéndoles: Oíd mi voz, y ejecutad aquéllas, conforme a todo lo que os mando, y me seréis por pueblo, y yo seré a vosotros por Dios;.

Para que confirme el juramento que hice a vuestros padres, que les daría la tierra que corre leche y miel, como este día. Y respondí, y dije: Amén, oh Jehová..

Y Jehová me dijo: Pregona todas estas palabras en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalem, diciendo: Oíd las palabras de este pacto, y ponedlas por obra..

Porque con eficacia protesté a vuestros padres el día que los hice subir de la tierra de Egipto hasta el día de hoy, madrugando y protestando, diciendo: Oíd mi voz..

Mas no oyeron, ni inclinaron su oído, antes se fueron cada uno tras la imaginación de su corazón malvado: por tanto, traeré sobre ellos todas las palabras de este pacto, el cual mandé que cumpliesen, y no lo cumplieron..

Y díjome Jehová: Conjuración se ha hallado en los varones de Judá, y en los moradores de Jerusalem..

Hanse vuelto a las maldades de sus primeros padres, los cuales no quisieron escuchar mis palabras, antes se fueron tras dioses ajenos para servirles; la casa de Israel y la casa de Judá invalidaron mi pacto, el cual había yo concertado con sus padres..

Por tanto, así ha dicho Jehová: He aquí yo traigo sobre ellos mal del que no podrán salir; y clamarán a mi, y no los oiré..

E irán las ciudades de Judá y los moradores de Jerusalem, y clamarán a los dioses a quienes queman ellos inciensos, los cuales no los podrán salvar en el tiempo de su mal..

Porque según el número de tus ciudades fueron tus dioses, oh Judá; y según el número de tus calles, oh Jerusalem, pusisteis los altares de ignominia, altares para ofrecer sahumerios a Baal..

Tú pues, no ores por este pueblo, ni levantes por ellos clamor ni oración; porque yo no oiré el día que en su aflicción a mí clamaren..

¿Qué tiene mi amado en mi casa, habiendo hecho abominaciones muchas? Y las carnes santas pasarán de sobre ti, porque en tu maldad te gloriaste..

Oliva verde, hermosa en fruto y en parecer, llamó Jehová tu nombre. A la voz de gran palabra hizo encender fuego sobre ella, y quebraron sus ramas..

Pues Jehová de los ejércitos, que te plantó, ha pronunciado mal contra ti, a causa de la maldad de la casa de Israel y de la casa de Judá, que hicieron a sí mismos, provocándome a ira con incensar a Baal..

Y Jehová me lo hizo saber, y conocilo: entonces me hiciste ver sus obras..

Y yo como cordero inocente que llevan a degollar, pues no entendía que maquinaban contra mí designios, diciendo: Destruyamos el árbol con su fruto, y cortémoslo de la tierra de los vivientes, y no haya más memoria de su nombre..

Mas, oh Jehová de los ejércitos, que juzgas justicia, que sondas los riñones y el corazón, vea yo tu venganza de ellos: porque a ti he descubierto mi causa..

Por tanto, así ha dicho Jehová de los varones de Anathoth, que buscan tu alma, diciendo: No profetices en nombre de Jehová, y no morirás a nuestras manos:.

Así pues ha dicho Jehová de los ejércitos: He aquí que yo los visito; los mancebos morirán a cuchillo; sus hijos y sus hijas morirán de hambre;.

Y no quedará resto de ellos: porque yo traeré mal sobre los varones de Anathoth, año de su visitación..