Jeremías, 31:17 Versículo Bíblico

Deberíamos tomar continuamente en consideración el versículo Jeremías, 31:17 de La Sagrada Biblia de tal forma que podamos meditar sobre él.Tal vez sería acertado cuestionarse ¿Qué intentaba decirnos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo Jeremías, 31:17? ¿En qué coyunturas de nuestra vida diaria podemos llevar a la práctica lo que hemos llegado a saber gracias al versículo Jeremías, 31:17 de La Sagrada Biblia?

Meditar sobre el versículo Jeremías, 31:17 nos supone una ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a aproximarnos más a Dios, ese es el motivo por el cual es oportuno recurrir al versículo Jeremías, 31:17 todas y cada una de las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir para saber cómo actuar o para traer paz a nuestro espíritu.

Esperanza también hay para tu fin, dice Jehová, y los hijos volverán a su término.

Opiniones de nuestros usuarios

Sofia Serrano Santiago

Yo creo en Dios, pero creo que ya debería de modernizar su forma de hablar, o que los traductores hicieran un esfuerzo porque no todos sabemos latín y el versículo Jeremías, 31:17 creo que es más latín que español, y por eso no se entiende bien lo que dice. De todos modos es la palabra de Dios, así que Amén.

Victor Villanueva Roldan

No sé si pedir el número del camello que escribió el versículo Jeremías, 31:17 o el de lo que están comentando…

Manuel Martinez Gracia

Quiero declarar mi amor por Dios nuestro Señor. Gracias Padre Todopoderoso por tus palabras en el versículo Jeremías, 31:17.

Bernardo Iglesias Casado

Leer el versículo Jeremías, 31:17 de la Santa Biblia es un masaje para el alma.

Yolanda Hurtado Carmona

Siento que el Señor me ha hablado directamente a mi corazón con este versículo de la Biblia. Pareciera como que sabía que hoy necesitaba leer el versículo Jeremías, 31:17 para lograr la inspiración y la calma en mi corazón. Dios siempre cuida de sus hijos y nunca nos abandona. Gracias Señor.