Josué Capítulo 6

Dios, Nuestro Señor se comunica con nosotros, sus hijos e hijas, y esto lo hace mediante la Biblia. En la Sagrada Biblia podemos encontrar escrita su doctrina y sus lecciones para la humanidad. En nuestra disposición está leerla y captar toda la sabiduría que reside en sus palabras. En el capítulo 6 del Josué del Nuevo Testamento de la Biblia encontramos resguardadas intensas dosis de sabiduría y conocimiento que Dios Creador entregó a los hombres para que ellos pudieran estar cerca de Él.

El Josué del Nuevo Testamento está compuesto por 24 capítulos. Ahora en cristianismo.info te ofrecemos la posibilidad de leer lo que Dios Nuestro Señor deseó mostrarnos en el capítulo 6. Para facilitar su lectura y comprensión el capítulo 6 del Josué se encuentra fraccionado en 27 versículos. De esta manera es más fácil leer y aprender de memoria la palabra del Señor, para que te acompañe siempre y te sirva como una luz en tu camino.

Nuestro Padre, Dios Todopoderoso no nos deja nunca solos, es un padre clemente que nos guía. Por eso nos regaló su palabra que nos inspira y sirve de linterna en los instantes más oscuros. En el capítulo 6 del Josué del Nuevo Testamento descubrirás con toda seguridad la clave a muchas de las dudas que a menudo se manifiestan en la vida. Cuando vas a dar inicio a tu diálogo con el Altísimo, haber leído su palabra escrita en los textos que componen la Biblia, y conocer en profundidad los 27 versículos del capítulo 6 del Josué te será de mucha utilidad. De esta forma podrás tener siempre presente en tus oraciones en qué consiste la palabra de Dios Padre que está en los Cielos.

Versículos del capítulo 6 del libro Josué

Empero Jericó estaba cerrada, bien cerrada, a causa de los hijos de Israel: nadie entraba, ni salía..

Mas Jehová dijo a Josué: Mira, yo he entregado en tu mano a Jericó y a su rey, con sus varones de guerra..

Cercaréis pues la ciudad todos los hombres de guerra, yendo alrededor de la ciudad una vez: y esto haréis seis días..

Y siete sacerdotes llevarán siete bocinas de cuernos de carneros delante del arca; y al séptimo día daréis siete vueltas a la ciudad, y los sacerdotes tocarán las bocinas..

Y cuando tocaren prolongadamente el cuerno de carnero, así que oyereis el sonido de la bocina, todo el pueblo gritará a gran voz, y el muro de la ciudad caerá debajo de sí: entonces el pueblo subirá cada uno en derecho de sí..

Y llamando Josué hijo de Nun a los sacerdotes, les dijo: Llevad el arca del pacto, y siete sacerdotes lleven bocinas de cuernos de carneros delante del arca de Jehová..

Y dijo al pueblo: Pasad, y rodead la ciudad; y los que están armados pasarán delante del arca de Jehová..

Y así que Josué hubo hablado al pueblo, los siete sacerdotes, llevando las siete bocinas de cuernos de carneros, pasaron delante del arca de Jehová, y tocaron las bocinas: y el arca del pacto de Jehová los seguía..

Y los armados iban delante de los sacerdotes que tocaban las bocinas, y la gente reunida iba detrás del arca, andando y tocando bocinas..

Y Josué mandó al pueblo, diciendo: Vosotros no daréis grita, ni se oirá vuestra voz, ni saldrá palabra de vuestra boca, hasta el día que yo os diga: Gritad: entonces daréis grita..

El arca pues de Jehová dio una vuelta alrededor de la ciudad, y viniéronse al real, en el cual tuvieron la noche..

Y Josué se levantó de mañana, y los sacerdotes tomaron el arca de Jehová..

Y los siete sacerdotes, llevando las siete bocinas de cuernos de carneros, fueron delante del arca de Jehová, andando siempre y tocando las bocinas; y los armados iban delante de ellos, y la gente reunida iba detrás del arca de Jehová, andando y tocando las bocinas..

Así dieron otra vuelta a la ciudad el segundo día, y volviéronse al real: de esta manera hicieron por seis días..

Y al séptimo día levantáronse cuando subía el alba, y dieron vuelta a la ciudad de la misma manera siete veces: solamente este día dieron vuelta alrededor de ella siete veces..

Y como los sacerdotes hubieron tocado las bocinas la séptima vez, Josué dijo al pueblo: Dad grita, porque Jehová os ha entregado la ciudad..

Mas la ciudad será anatema a Jehová, ella con todas las cosas que están en ella: solamente Rahab la ramera vivirá, con todos los que estuvieren en casa con ella, por cuanto escondió los mensajeros que enviamos..

Empero guardaos vosotros del anatema, que ni toquéis, ni toméis alguna cosa del anatema, porque no hagáis anatema el campo de Israel, y lo turbéis..

Mas toda la plata, y el oro, y vasos de metal y de hierro, sea consagrado a Jehová, y venga al tesoro de Jehová..

Entonces el pueblo dio grita, y los sacerdotes tocaron las bocinas: y aconteció que como el pueblo hubo oído el sonido de la bocina, dio el pueblo grita con gran vocerío, y el muro cayó a plomo. El pueblo subió luego a la ciudad, cada uno en derecho de sí, y tomáronla..

Y destruyeron todo lo que en la ciudad había; hombres y mujeres, mozos y viejos, hasta los bueyes, y ovejas, y asnos, a filo de espada..

Mas Josué dijo a los dos hombres que habían reconocido la tierra: Entrad en casa de la mujer ramera, y haced salir de allá a la mujer, y a todo lo que fuere suyo, como lo jurasteis..

Y los mancebos espías entraron, y sacaron a Rahab, y a su padre, y a su madre, y a sus hermanos, y todo lo que era suyo; y también sacaron a toda su parentela, y pusiéronlos fuera del campo de Israel..

Y consumieron con fuego la ciudad, y todo lo que en ella había: solamente pusieron en el tesoro de la casa de Jehová la plata, y el oro, y los vasos de metal y de hierro..

Mas Josué salvó la vida a Rahab la ramera, y a la casa de su padre, y a todo lo que ella tenía: y habitó ella entre los Israelitas hasta hoy; por cuanto escondió los mensajeros que Josué envió a reconocer a Jericó..

Y en aquel tiempo Josué les juramentó diciendo: Maldito delante de Jehová el hombre que se levantare y reedificare esta ciudad de Jericó. En su primogénito eche sus cimientos, y en su menor asiente sus puertas..

Fue pues Jehová con Josué, y su nombre se divulgó por toda la tierra..