Levítico, 4:28 Versículo Bíblico

El versiculo Levítico, 4:28 de los Textos Sagrados que componen la Biblia consiste en algo que es muy recomendable tomar continuamente en consideración para meditar acerca de él. Acaso deberíamos preguntarnos ¿Qué pretendía manifestarnos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo Levítico, 4:28? ¿En qué ocasiones de nuestra vida cotidiana podemos aplicar lo que hemos aprendido gracias al versículo Levítico, 4:28 de la Santa Biblia?

Dedicar tiempo a la meditación acerca de el versículo Levítico, 4:28 nos ayuda a ser más agradables a los ojos de el Creador del Cielo y de la Tierra y a acercarnos más a Dios, ese es el motivo por el cual es conveniente recurrir al versículo Levítico, 4:28 cuando creamos que necesitemos una luz que nos guíe y así saber cómo actuar o para traer la tranquilidad a nuestros corazones.

Luego que le fuere conocido su pecado que cometió, traerá por su ofrenda una hembra de las cabras, una cabra sin defecto, por su pecado que habrá cometido:

Opiniones de nuestros usuarios

Nuria Ibañez Menendez

No conocía este versículo de la Biblia. Deberíamos leer más la Biblia para ser mejores personas. Ahora ya me voy a aprender el versículo Levítico, 4:28 de memoria para siempre.

Antonia Valencia Ferrer

Diosito nos dejó el versículo Levítico, 4:28 y toda la biblia para que nunca olvidemos que aunque las cosas se pongan feas, Él siempre nos cuida y nos ama. Amén.

Oscar Casas Camacho

Siento que el Señor me ha hablado directamente a mi corazón con este versículo de la Biblia. Pareciera como que sabía que hoy necesitaba leer el versículo Levítico, 4:28 para lograr la inspiración y la calma en mi corazón. Dios siempre cuida de sus hijos y nunca nos abandona. Gracias Señor.

Jose Carlos Cuenca Aguirre

Me gustó mucho el formato del versiculo Levítico, 4:28. Lástima que no se pueda compartir en Facebook o en Whatsapp.

Bernardo Bravo Gil

Hay que confiar en Dios siempre. Él nos ama y nos cuida. Quienes no comprenden el versículo Levítico, 4:28 es porque no han abierto su corazón a Dios.