Miqueas, 2:3 Versículo Bíblico

Es conveniente tener constantemente presente el versículo Miqueas, 2:3 de los Textos Sagrados que componen la Biblia con el objetivo de analizarlo y pensar sobre él.Seguramente sería acertado cuestionarse ¿Qué trataba de manifestarnos Dios con el versículo Miqueas, 2:3? ¿En qué coyunturas de nuestra vida diaria podemos poner en práctica lo que hemos aprendido gracias al versículo Miqueas, 2:3 de La Sagrada Biblia?

Hacer un análisis profundo en relación con el versículo Miqueas, 2:3 nos es de gran ayuda a ser mejores personas y a acercarnos más a Dios, esa es la cuestión por la cual es aconsejable acudir al versículo Miqueas, 2:3 en todas aquellas ocasiones en que pueda servirnos de guía de modo que podamos saber cómo actuar o para traer la paz a nuestras almas.

Por tanto, así ha dicho Jehová: He aquí, yo pienso sobre esta familia un mal, del cual no sacaréis vuestros cuellos, ni andaréis erguidos; porque el tiempo será malo.

Opiniones de nuestros usuarios

Mohammed Montes Ponce

El versiculo Miqueas, 2:3 me hiso reflecsionar. Dios nos ama y debemos amarle. Amen.

Cristina Montero Vargas

Siento que el Señor me ha hablado directamente a mi corazón con este versículo de la Biblia. Pareciera como que sabía que hoy necesitaba leer el versículo Miqueas, 2:3 para lograr la inspiración y la calma en mi corazón. Dios siempre cuida de sus hijos y nunca nos abandona. Gracias Señor.

Isaac Polo Rivas

Pues yo creo en Diosito, pero se me hace bien complicado comprender esa forma de hablar tan antigua. El versículo Miqueas, 2:3 es bien complicado de entender qué quiere decir, como cuando estudiábamos poesía en el salón. Ni modo, que alguien me explique.

Andres Ros Valverde

Te damos las gracias por tu infinita bondad y sabiduría, Padre. Gracias por regalarnos el versículo Miqueas, 2:3. Amén.

Fatima Montoya Valverde

Gracias, gracias,gracias Padre. Tu amor infinito se nos muestra en este versículo Miqueas, 2:3 y en todas y cada una de las palabras que escribiste en la Biblia para nosotros. Gracias a ellas la salvación de nuestras almas está cerca.