Dios se dirige a nosotros, sus hijos creados a su imagen y semejanza, y nos habla mediante la Sagrada Biblia. En la Biblia es el lugar en donde se escribió su palabra y sus enseñanzas para la humanidad. En nuestra disposición está leerla y comprender toda la sabiduría que se encuentra en sus palabras. En el capítulo 5 del Nehemías del Nuevo Testamento de la Biblia podemos encontrar encerradas porciones de bondad y sabiduría que Dios otorgó a sus hijos para que ellos llegaran a acercarse a Él.
El Nehemías del Nuevo Testamento se compone de 13 capítulos. Ahora en cristianismo.info es posible leer y aprehender lo que Dios deseó revelarnos en el capítulo 5. Para que lo puedas leer y comprender mejor el capítulo 5 del Nehemías está fraccionado en 19 versículos. De esta forma es más fácil leer y aprender de memoria la palabra Dios que está en los Cielos, de modo que esté a tu lado siempre y te sirva para trazar tu rumbo.
Nuestro Padre Bondadoso jamás nos deja solos, es un padre misericordioso que nos guía. Por ese motivo nos obsequió con su palabra que nos alumbra y sirve de faro en los trances más sombríos. En el capítulo 5 del Nehemías del Nuevo Testamento podrás encontrar sin dudarlo la respuesta a gran cantidad de dilemas que se puedan manifestar durante la vida. Al principio de tu diálogo con Nuestro Señor, el hecho de leer su palabra escrita en la Biblia, y conocer en profundidad los 19 versículos del capítulo 5 del Nehemías te será de gran utilidad. De esta forma podrás tener siempre presente en tus plegarias en qué consiste la verdadera palabra de Dios.
Entonces fue grande el clamor del pueblo y de sus mujeres contra los Judíos sus hermanos..
Y había quien decía: Nosotros, nuestros hijos y nuestras hijas, somos muchos: hemos por tanto tomado grano para comer y vivir..
Y había quienes decían: Hemos empeñado nuestras tierras, y nuestras viñas, y nuestras casas, para comprar grano en el hambre..
Y había quienes decían: Hemos tomado prestado dinero para el tributo del rey, sobre nuestras tierras y viñas..
Ahora bien, nuestra carne es como la carne de nuestros hermanos, nuestros hijos como sus hijos; y he aquí que nosotros sujetamos nuestros hijos y nuestras hijas a servidumbre, y hay algunas de nuestras hijas sujetas: mas no hay facultad en nuestras manos para rescatarlas, porque nuestras tierras y nuestras viñas son de otros..
Y enojeme en gran manera cuando oí su clamor y estas palabras..
Medité lo entonces para conmigo, y reprendí a los principales y a los magistrados, y díjeles: ¿Tomáis cada uno usura de vuestros hermanos? Y convoqué contra ellos una grande junta..
Y díjeles: Nosotros rescatamos a nuestros hermanos Judíos que habían sido vendidos a las gentes, conforme a la facultad que había en nosotros: ¿y vosotros aun vendéis a vuestros hermanos, y serán vendidos a nosotros? Y callaron, que no tuvieron qué responder..
Y dije: No es bien lo que hacéis, ¿no andaréis en temor de nuestro Dios, por no ser el oprobio de las gentes enemigas nuestras?.
También yo, y mis hermanos, y mis criados, les hemos prestado dinero y grano: relevémosles ahora de este gravamen..
Ruégoos que les devolváis hoy sus tierras, sus viñas, sus olivares, y sus casas, y la centésima parte del dinero y grano, del vino y del aceite que demandáis de ellos..
Y dijeron: Devolveremos, y nada les demandaremos; haremos así como tú dices. Entonces convoqué los sacerdotes, y juramentelos que harían conforme a esto..
Además sacudí mi vestido, y dije: Así sacuda Dios de su casa y de su trabajo a todo hombre que no cumpliere esto, y así sea sacudido y vacío. Y respondió toda la congregación: ¡Amén! Y alabaron a Jehová. Y el pueblo hizo conforme a esto..
También desde el día que me mandó el rey que fuese gobernador de ellos en la tierra de Judá, desde el año veinte del rey Artajerjes hasta el año treinta y dos, doce años, ni yo ni mis hermanos comimos el pan del gobernador..
Mas los primeros gobernadores que fueron antes de mí, cargaron al pueblo, y tomaron de ellos por el pan y por el vino sobre cuarenta siclos de plata: a más de esto, sus criados se enseñoreaban sobre el pueblo; pero yo no hice así, a causa del temor de Dios..
También en la obra de este muro instauré mi parte, y no compramos heredad: y todos mis criados juntos estaban allí a la obra..
Además ciento y cincuenta hombres de los Judíos y magistrados, y los que venían a nosotros de las gentes que están en nuestros contornos, estaban a mi mesa..
Y lo que se aderezaba para cada día era un buey, seis ovejas escogidas, y aves también se aparejaban para mí, y cada diez días vino en toda abundancia: y con todo esto nunca requerí el pan del gobernador, porque la servidumbre de este pueblo era grave..
Acuérdate de mí para bien, Dios mío, y de todo lo que hice a este pueblo..