Números, 22:16 Versículo Bíblico

El versiculo Números, 22:16 de los Textos Sagrados que componen la Biblia es algo que deberíamos tener siempre presente con la finalidad de meditar en torno a él.Quizás deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué intentaba proponernos el Señor con el versículo Números, 22:16? ¿Cuáles son los momentos de nuestro día a día en que seremos capaces de recurrir a lo que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Números, 22:16 de La Sagrada Biblia?

Dedicar tiempo a la meditación en relación con el versículo Números, 22:16 nos supone una ayuda a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, por eso es bueno apoyarse en el versículo Números, 22:16 en todas aquellas ocasiones en que necesitemos una luz que nos guíe de modo que podamos saber en qué forma acturar o para traer la serenidad a nuestros corazones y almas.

Los cuales vinieron a Balaam, y dijéronle: Así dice Balac, hijo de Zippor: Ruégote que no dejes de venir a mí:

Opiniones de nuestros usuarios

Maria Cristina Sancho Carrillo

Yo creo en Dios, pero creo que ya debería de modernizar su forma de hablar, o que los traductores hicieran un esfuerzo porque no todos sabemos latín y el versículo Números, 22:16 creo que es más latín que español, y por eso no se entiende bien lo que dice. De todos modos es la palabra de Dios, así que Amén.

Maria Mar Lozano Pacheco

No entendí nada de toda esta pendejada. El versículo Números, 22:16 no lo entiende nadie, así que los que escriben su opinión aquí, no se hagan, ustedes tampoco lo entendieron.

Teresa Padilla Molina

No digas que no comprendes el versículo Números, 22:16, tan solo di Amén y verás la luz.

Luisa Anton Luque

El versiculo Números, 22:16 me hiso reflecsionar. Dios nos ama y debemos amarle. Amen.

Marcos Montoya Anton

Pues yo creo en Diosito, pero se me hace bien complicado comprender esa forma de hablar tan antigua. El versículo Números, 22:16 es bien complicado de entender qué quiere decir, como cuando estudiábamos poesía en el salón. Ni modo, que alguien me explique.