Proverbios, 30:8 Versículo Bíblico

Hay que tomar en todo momento en cuenta el versículo Proverbios, 30:8 de los Textos Sagrados que componen la Biblia para meditar acerca de él.Probablemente sería adecuado preguntarse ¿Qué trataba de decirnos Dios, Creador del Cielo y de la Tierra con el versículo Proverbios, 30:8? ¿Cuáles serán las coyunturas de nuestra vida cotidiana en que seremos capaces de poner en práctica aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Proverbios, 30:8 de Las Sagradas Escrituras?

Meditar en relación con el versículo Proverbios, 30:8 nos resulta fundamental para llegar a a ser capaces de acercarnos más al mensaje de Nuestro Señor y a avanzar en nuestro camino hacia la Gracia de Dios, ese es el motivo por el cual es oportuno recurrir al versículo Proverbios, 30:8 siempre que nos pueda servir de guía y así saber en qué forma acturar o para traer el sosiego a nuestras almas.

Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí. No me des pobreza ni riquezas; Mantenme del pan que he menester;

Opiniones de nuestros usuarios

Jonathan Corral Aguirre

Este versículo Proverbios, 30:8 se lo voy a mandar a mi mamá, pues ella siempre anda diciendo cosas de Diosito y pues en esto se contradice y no es verdad lo que ella dice, y creo yo que la Biblia sabe mas de Diosito que mi mama pues los que la escribieron conocieron a Diosito y mi mama pues si está mayor pero no tanto.

Purificacion Alarcon Simon

Siento que el Señor me ha hablado directamente a mi corazón con este versículo de la Biblia. Pareciera como que sabía que hoy necesitaba leer el versículo Proverbios, 30:8 para lograr la inspiración y la calma en mi corazón. Dios siempre cuida de sus hijos y nunca nos abandona. Gracias Señor.

Araceli Lorenzo Rodriguez

Cada versículo de la Santa Biblia es una joya para el alma, y el versículo Proverbios, 30:8 es de mis favoritas.

Jose Miguel Valle Fernandez

Se agradece una web como esta, sin interferencias, en la que encuentras fácilmente el versículo Proverbios, 30:8 y puedes meditar tranquilamente sobre él. No quiero que me lo anden explicando, tan solo Dios puede hacerlo.