Salmos Capítulo 114

Dios, Nuestro Señor habla con nosotros, sus hijos, y esto lo hace mediante la Sagrada Biblia. En la Biblia es el lugar en donde se escribió su doctrina y sus lecciones para la humanidad. En nuestra disposición está leerla y entender toda la sapiencia que se encuentra en sus palabras. En el capítulo 114 del Salmos del Nuevo Testamento de las Sagradas Escrituras se hallan confinadas perlas de sabiduría que el Padre regaló a sus hijos para que ellos tuvieran la capacidad de estar junto a Él.

El Salmos del Nuevo Testamento se compone de 150 capítulos. Ahora en nuestra web puedes leer e interiorizar lo que Dios Nuestro Señor quiso mostrarnos en el capítulo 114. Para facilitar su lectura y comprensión el capítulo 114 del Salmos se encuentra fraccionado en 8 versículos. De este modo es más fácil leer y aprender de memoria la palabra del Padre, para que te acompañe siempre y te sirva de guía.

Dios Nuestro Señor está siempre junto nosotros, es un padre bueno que nos aconseja. Por eso nos brindó su palabra que nos orienta y sirve de Estrella Polar en los instantes más oscuros. En el capítulo 114 del Salmos del Nuevo Testamento encontrarás con toda seguridad la solución a muchas de las dudas que te puedan surgir a lo largo de la vida. A la hora de iniciar tu diálogo con Nuestro Señor, leer su palabra escrita en la Sagrada Biblia, y dominar en profundidad los 8 versículos del capítulo 114 del Salmos te será muy útil. Así tendrás siempre presente en tus oraciones cuál es la verdadera palabra de Dios Padre que está en los Cielos.

Versículos del capítulo 114 del libro Salmos

Cuando salió Israel de Egipto, La casa de Jacob del pueblo bárbaro,.

Judá fue su consagrada heredad, Israel su señorío..

La mar vio, y huyó; El Jordán se volvió atrás..

Los montes saltaron como carneros: Los collados como corderitos..

¿Qué tuviste, oh mar, que huiste? ¿Y tú, oh Jordán, que te volviste atrás?.

Oh montes, ¿por qué saltasteis como carneros, Y vosotros, collados, como corderitos?.

A la presencia del Señor tiembla la tierra, A la presencia del Dios de Jacob;.

El cual tornó la peña en estanque de aguas, Y en fuente de aguas la roca..