Salmos, 36:7 Versículo Bíblico

Hay que tener en todo momento presente el versículo Salmos, 36:7 de los Textos Sagrados que componen la Biblia a fin de reflexionar en torno a él.Tal vez deberíamos hacernos la pregunta ¿Qué pretendía proponernos Dios Nuestro Señor con el versículo Salmos, 36:7? ¿En qué coyunturas de nuestro día a día tenemos la oportunidad de hacer valer aquello que hemos alcanzado a saber gracias al versículo Salmos, 36:7 de La Sagrada Biblia?

El hecho de reflexionar en torno a lo que se refiere el versículo Salmos, 36:7 nos supone una ayuda a ser mejores cristianos y a aproximarnos más a Dios, por esa cuestión es oportuno apoyarse en el versículo Salmos, 36:7 todas las veces que precisemos que la palabra de Dios, Nuestro Señor nos indique el camino a seguir de modo que podamos saber qué pasos dar o para traer paz a nuestros corazones.

¡Cuán ilustre, oh Dios, es tu misericordia! Por eso los hijos de los hombres se amparan bajo la sombra de tus alas.

Opiniones de nuestros usuarios

Anna Gallego Navarro

Gracias, gracias,gracias Padre. Tu amor infinito se nos muestra en este versículo Salmos, 36:7 y en todas y cada una de las palabras que escribiste en la Biblia para nosotros. Gracias a ellas la salvación de nuestras almas está cerca.

Maria Antonia Bernal Avila

Yo creo en Dios, pero creo que ya debería de modernizar su forma de hablar, o que los traductores hicieran un esfuerzo porque no todos sabemos latín y el versículo Salmos, 36:7 creo que es más latín que español, y por eso no se entiende bien lo que dice. De todos modos es la palabra de Dios, así que Amén.

Julian Duran Cuenca

En Salmos, 36:7 se nota el amor y la inspiración de Dios en cada palabra y cada silencio. Amén.

Jesus Maria Silva Ramirez

No conocía este versículo de la Biblia. Deberíamos leer más la Biblia para ser mejores personas. Ahora ya me voy a aprender el versículo Salmos, 36:7 de memoria para siempre.

Dolores Salvador Rodrigo

Quiero declarar mi amor por Dios nuestro Señor. Gracias Padre Todopoderoso por tus palabras en el versículo Salmos, 36:7.