Salmos Capítulo 51

Dios se dirige a nosotros, sus hijos creados a su imagen y semejanza, y esto lo hace a través de la Sagrada Biblia. En la Biblia es el lugar en donde se escribió su doctrina y sus lecciones para la humanidad. Nosotros somos quienes decidimos si leerla y captar toda la sapiencia que se halla en sus palabras. En el capítulo 51 del Salmos del Nuevo Testamento de los textos de las Biblia encontramos resguardadas perlas de sabiduría que Dios Nuestro Señor proporcionó a los seres humanos para que así ellos llegaran a estar al lado de Él.

El Salmos del Nuevo Testamento tiene 150 capítulos. En cristianismo.info tienes la posibilidad de leer y aprehender lo que Dios, en toda su Bondad quiso enseñarnos en el capítulo 51. Para que la lectura y la comprensión sean más fáciles el capítulo 51 del Salmos está dividido en 19 versículos. Así es más sencillo leer y retener en la memoria la palabra del Padre, para que así esté contigo siempre y te sirva para trazar tu rumbo.

Nuestro Amado Padre Celestial no nos deja nunca solos, es un padre benévolo que nos aconseja. Ese fue el motivo por el cual nos regaló su palabra que nos orienta y sirve de antorcha en los momentos más oscuros. En el capítulo 51 del Salmos del Nuevo Testamento descubrirás con toda seguridad la clave a muchas de las cuestiones que de pronto aparecen en la vida. Al principio de tu diálogo con el Padre, leer su palabra escrita en la Biblia, y dominar en profundidad los 19 versículos del capítulo 51 del Salmos te será muy útil. Así podrás tener siempre presente en tus oraciones cuál es la verdadera palabra de Dios Todopoderoso.

Versículos del capítulo 51 del libro Salmos

Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu misericordia: Conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones..

Lávame más y más de mi maldad, Y límpiame de mi pecado..

Porque yo reconozco mis rebeliones; Y mi pecado está siempre delante de mí..

A ti, a ti solo he pecado, Y he hecho lo malo delante de tus ojos: Porque seas reconocido justo en tu palabra, Y tenido por puro en tu juicio..

He aquí, en maldad he sido formado, Y en pecado me concibió mi madre..

He aquí, tú amas la verdad en lo íntimo: Y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría..

Purifícame con hisopo, y será limpio: Lávame, y seré emblanquecido más que la nieve..

Hazme oír gozo y alegría; Y se recrearán los huesos que has abatido..

Esconde tu rostro de mis pecados, Y borra todas mis maldades..

Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio; Y renueva un espíritu recto dentro de mí..

No me eches de delante de ti; Y no quites de mí tu santo espíritu..

Vuélveme el gozo de tu salud; Y el espíritu libre me sustente..

Enseñaré a los prevaricadores tus caminos; Y los pecadores se convertirán a ti..

Líbrame de homicidios, oh Dios, Dios de mi salud: Cantará mi lengua tu justicia..

Señor, abre mis labios; Y publicará mi boca tu alabanza..

Porque no quieres tú sacrificio, que yo daría; No quieres holocausto..

Los sacrificios de Dios son el espíritu quebrantado: Al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios..

Haz bien con tu benevolencia a Sion: Edifica los muros de Jerusalem..

Entonces te agradarán los sacrificios de justicia, el holocausto u ofrenda del todo quemada: Entonces ofrecerán sobre tu altar becerros..