Salmos Capítulo 61

Dios, Nuestro Señor se dirige a nosotros, que somos fruto de su Creación, y lo hace a través de los textos sagrados recogidos en La Biblia. En la Biblia se encuentra escrita su palabra y sus lecciones para la humanidad. De nosotros, sus hijos, depende leerla y tratar de captar toda la sapiencia que se encuentra en sus palabras. En el capítulo 61 del Salmos del Nuevo Testamento de la Biblia podemos encontrar encerradas píldoras de conocimiento que el Padre regaló a sus hijos con el objetivo de que ellos pudieran estar junto a Él.

El Salmos del Nuevo Testamento dispone de 150 capítulos. Aquí tienes la posibilidad de leer y estudiar lo que Dios se propuso revelarnos en el capítulo 61. Para que lo puedas leer y comprender mejor el capítulo 61 del Salmos se encuentra dividido en 8 versículos. De este modo es más fácil leer y recordar la palabra Dios que está en los Cielos, de forma que te acompañe siempre y te sirva para trazar tu rumbo.

Nuestro Padre Todopoderoso jamás nos abandona, es un padre bueno que nos aconseja. Por ese motivo nos brindó su palabra que nos alumbra y sirve de luz en los momentos más tenebrosos. En el capítulo 61 del Salmos del Nuevo Testamento podrás encontrar sin duda la solución a muchas de las dudas que puedan aparecer durante la vida. En el inicio de tu diálogo con Nuestro Señor, leer su palabra escrita en la Biblia, y entender en profundidad los 8 versículos del capítulo 61 del Salmos te será de gran utilidad. De este modo te será posible tener siempre presente en tus oraciones cuál es el mandato de Dios Padre que está en los Cielos.

Versículos del capítulo 61 del libro Salmos

Oye, oh Dios, mi clamor; A mi oración atiende..

Desde el cabo de la tierra clamaré a ti, cuando mi corazón desmayare: A la peña más alta que yo me conduzcas..

Porque tú has sido mi refugio, Y torre de fortaleza delante del enemigo..

Yo habitaré en tu tabernáculo para siempre: Estaré seguro bajo la cubierta de tus alas..

Porque tú, oh Dios, has oído mis votos, Has dado heredad a los que temen tu nombre..

Días sobre días añadirás al rey: Sus años serán como generación y generación..

Estará para siempre delante de Dios: Misericordia y verdad prepara que lo conserven..

Así cantaré tu nombre para siempre, Pagando mis votos cada día..