Salmos Capítulo 80

Dios, Nuestro Señor que está en los Cielos se comunica con nosotros, que somos sus hijos, y lo hace a través de los textos sagrados recogidos en La Biblia. En la Sagrada Biblia se encuentra escrita su palabra y sus conocimientos para la humanidad. De nosotros, sus hijos, depende leerla y tratar de captar toda la bondad y sabiduría que hay en sus palabras. En el capítulo 80 del Salmos del Nuevo Testamento de la Sagrada Biblia podemos encontrar encerradas porciones de bondad y sabiduría que el Padre concedió a los seres humanos para que ellos pudieran aproximarse a Él.

El Salmos del Nuevo Testamento tiene 150 capítulos. En esta web tienes la posibilidad de leer lo que Dios Nuestro Señor deseó enseñarnos en el capítulo 80. Para que la lectura y la comprensión sean más fáciles el capítulo 80 del Salmos se encuentra dividido en 19 versículos. De esta forma es más simple leer y recordar la palabra del Señor, de modo que esté contigo siempre y te sirva para no perder el rumbo de tu vida.

Nuestro Padre que todo lo puede está siempre con nosotros, es un padre justo que nos orienta. Por eso nos proporcionó su palabra que nos inspira y sirve de fanal en los periodos más oscuros. En el capítulo 80 del Salmos del Nuevo Testamento hallarás sin dudarlo la clave a muchas de las dudas que puedan aparecer en la vida. Al principio de tu diálogo con Dios, leer su palabra escrita en la Biblia, y conocer profundamente los 19 versículos del capítulo 80 del Salmos te será muy útil. De este modo te será posible tener siempre presente en tus rezos cuál es la verdadera palabra de Dios Padre que está en los Cielos.

Versículos del capítulo 80 del libro Salmos

Oh Pastor de Israel, escucha: Tú que pastoreas como a ovejas a José, Que estás entre querubines, resplandece..

Despierta tu valentía delante de Ephraim, y de Benjamín, y de Manasés, Y ven a salvarnos..

Oh Dios, haznos tornar; Y haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos..

Jehová, Dios de los ejércitos, ¿Hasta cuándo humearás tú contra la oración de tu pueblo?.

Dísteles a comer pan de lágrimas, Y dísteles a beber lágrimas en gran abundancia..

Pusístenos por contienda a nuestros vecinos: Y nuestros enemigos se burlan entre sí..

Oh Dios de los ejércitos, haznos tornar; Y haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos..

Hiciste venir una vid de Egipto: Echaste las gentes, y plantástela..

Limpiaste sitio delante de ella, E hiciste arraigar sus raíces, y llenó la tierra..

Los montes fueron cubiertos de su sombra; Y sus sarmientos como cedros de Dios..

Extendió sus vástagos hasta la mar, Y hasta el río sus mugrones..

¿Por qué aportillaste sus vallados, Y la vendimian todos los que pasan por el camino?.

Estropeola el puerco montés, Y paciola la bestia del campo..

Oh Dios de los ejércitos, vuelve ahora: Mira desde el cielo, y considera, y visita esta viña,.

Y la planta que plantó tu diestra, Y el renuevo que para ti corroboraste..

Quemada a fuego está, asolada: Perezcan por la reprensión de tu rostro..

Sea tu mano sobre el varón de tu diestra, Sobre el hijo del hombre que para ti corroboraste..

Así no nos volveremos de ti: Vida nos darás, e invocaremos tu nombre..

Oh Jehová, Dios de los ejércitos, haznos tornar; Haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos..