Santiago Capítulo 4

Dios Padre se comunica con nosotros, sus hijos e hijas, y lo hace mediante la Sagrada Biblia. En la Biblia es donde se encuentra escrita su doctrina y sus enseñanzas para la humanidad. De nosotros depende leerla y tratar de captar toda la bondad y sabiduría que hay en sus palabras. En el capítulo 4 del Santiago del Nuevo Testamento de las Sagradas Escrituras se encuentran encerradas auténticas dosis de conocimiento y bondad que Dios regaló a sus hijos con el objetivo de que ellos pudieran estar cerca de Él.

El Santiago del Nuevo Testamento consta de 5 capítulos. Ahora en cristianismo.info tienes la posibilidad de leer y aprehender lo que Nuestro Señor deseó enseñarnos en el capítulo 4. Para que sea más fácil leerlo y comprenderlo el capítulo 4 del Santiago se halla fraccionado en 17 versículos. Así es más fácil leer y memorizar la palabra Dios Todopoderoso, de modo que vaya contigo siempre y te sirva de guía.

Dios Nuestro Señor jamás nos deja solos, es un padre bondadoso que nos aconseja. Por eso nos proporcionó su palabra que nos alumbra y sirve de luz en los instantes más sombríos. En el capítulo 4 del Santiago del Nuevo Testamento encontrarás sin lugar a dudas la respuesta a muchas de las dudas que puedan aparecer a lo largo de la vida. Cuando vas a dar inicio a tu diálogo con el Padre, el hecho de leer su palabra escrita en las Sagradas Escrituras, y dominar en profundidad los 17 versículos del capítulo 4 del Santiago te será de gran ayuda. De esta manera tendrás siempre presente en tus plegarias cuál es la palabra de Dios Padre que está en los Cielos.

Versículos del capítulo 4 del libro Santiago

¿De dónde vienen las guerras y los pleitos entre vosotros? ¿No son de vuestras concupiscencias, las cuales combaten en vuestros miembros?.

Codiciáis, y no tenéis; matáis y ardéis de envidia, y no podéis alcanzar; combatís y guerreáis, y no tenéis lo que deseáis, porque no pedís..

Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites..

Adúlteros y adúlteras, ¿no sabéis que la amistad del mundo es enemistad con Dios? Cualquiera pues que quisiere ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios..

¿Pensáis que la Escritura dice sin causa: Es espíritu que mora en nosotros codicia para envidia?.

Mas Él da mayor gracia. Por esto dice: Dios resiste a los soberbios, y da gracia a los humildes..

Someteos pues a Dios; resistid al diablo, y de vosotros huirá..

Allegaos a Dios, y él se allegará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros de doblado ánimo, purificad los corazones..

Afligíos, y lamentad, y llorad. Vuestra risa se convierta en lloro, y vuestro gozo en tristeza..

Humillaos delante del Señor, y Él os ensalzará..

Hermanos, no murmuréis los unos de los otros. El que murmura del hermano, y juzga a su hermano, este tal murmura de la ley, y juzga a la ley; pero si tú juzgas a la ley, no eres guardador de la ley, sino juez..

Uno es el dador de la ley, que puede salvar y perder: ¿quién eres tú que juzgas a otro?.

Ea ahora, los que decís: Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año, y compraremos mercadería, y ganaremos:.

Y no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es un vapor que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece..

En lugar de lo cual deberíais decir: Si el Señor quisiere, y si viviéremos, haremos esto o aquello..

Mas ahora os jactáis en vuestras soberbias. Toda jactancia semejante es mala..

El pecado, pues, está en aquel que sabe hacer lo bueno, y no lo hace..